Un hombre de unos 50 años ha resultado infectado por la Fiebre Hemorrágica de Crimea-Congo después de sufrir una picadura de una garrapata a finales de mayo en un pinar, según ha expresado la consejera de Sanidad, Verónica Casado, que también ha afirmado que los contactos de esta persona se encuentra también en estudio por si hubieran sido infectados.
Así, hasta nueve personas se tienen vigiladas, según comentó al final de la rueda de prensa de este jueves, de manera que estos tendrán que vigilarse especialmente la temperatura corporal, principal síntoma de este tipo de fiebre que, como expresó, se da una o dos veces por año en la comunidad.
Y es que esta puede transmitirse de persona a persona con contacto con sangre o fluidos del enfermo, lo que puede ocurrir especialmente en personal sanitario cuando no está debidamente protegido.