ASPER pide “poner la lupa sobre el ocio nocturno” ante el aumento de contagios en Salamanca
La Asociación Progresista de Estudiantes Renovadores (ASPER) de la Universidad de Salamanca pidió este martes “poner la lupa sobre el ocio nocturno y sobre el incumplimiento de la normativa vigente” ante el aumento de los contagios en Salamanca capital, puesto que sería “un error” que el Estudio salmantino se viese “abocado al cierre” por dicha subida significativa de los casos positivos por COVID-19 en la ciudad charra.
En opinión de la nueva Junta Directiva de ASPER, encabezada por el estudiante de Derecho Emilio Ferrero García, el cierre de la USAL supondría “enormes pérdidas económicas para la ciudad” y, además, devendría en un “detrimento de la formación y el futuro” de los estudiantes, “piedra angular” de la USAL, al ampliar “la brecha de desigualdad existente” entre ellos con el regreso a la vía telemática plena “en una situación de crisis económica”.
Además, desde ASPER se mostraron “preocupados con la situación sanitaria en la ciudad” y señalaron su desacuerdo con “la criminalización del estudiantado”, puesto que, en su opinión, los alumnos de la Universidad de Salamanca están manteniendo “una conducta ejemplar y responsable” y los contagios entre los estudiantes son “casos aislados que representan un porcentaje despreciable” del cómputo de alumnos que estudian en la USAL.
Todo ello tras la toma de posesión del nuevo equipo directivo de ASPER, cuyas elecciones tuvieron que esperar “a causa de la situación sanitaria”, y que ahora ya cuentan con un nuevo equipo directivo encabezado por Emilio Ferrero, que estará acompañado en la Junta Directiva por Rebeca Bermejo, Jaime Camarero, Eduardo Izquierdo, Patricia Cabezas, Manuel García Seijas y Daniel Ratón.
En su nuevo cometido, la dirección de ASPER recordó que la representación estudiantil es “más importante que nunca en tiempos de pandemia” para que “haya una voz fuerte del estudiantado progresista en las instituciones universitarias” con el objetivo de “poner fin a las desigualdades” en la USAL, de cara a “construir una universidad pública, ecologista, feminista y solidaria que no deje a nadie atrás”.