La ciudad de Salamanca, junto a otros doce municipios de la provincia como Béjar o Ciudad Rodrigo, participarán en la campaña 'Repartiendo sonrisas', una iniciativa de Ecovidrio que pretende cambiar toneladas de vidrio acumulado en los contenedores verdes por mejoras y proyectos como 'juegaterapia' en las dependencias que utilizan niños con cáncer dentro del hospital salmantino.
Esta propuesta, que tiene el objetivo de acumular hasta 1.500 toneladas hasta febrero de 2021, servirá para incentivar el reciclaje entre la sociedad además de contar con el tinte solidario de ayudar al servicio de Hemato-Oncología Pediátrica del Complejo Asistencial Universitario de Salamanca (CAUSA).
En la presentación han participado el alcalde de la ciudad, Carlos García Carbayo, el director general de Calidad y Sostenibilidad Ambiental de la Junta de Castilla y León, Rubén Rodríguez, el responsable de zona de Ecovidrio, José Carlos Agustina, el jefe de Pedriatría en el CAUSA, Eduardo Consuegra, además de la humorista, Sara Escudero, que ha intervenido a través de la proyección de un vídeo sobre la iniciativa.
En el caso de Salamanca, la ciudad lucirá un contenedor decorado para explicar la propuesta en la isla de reciclaje situada entre Plaza de España y Parque de la Alamedilla, entre los más de 550 de color verde repartidos por la ciudad, lo que supone uno por cada 251 habitantes, una cifra mejor que la media nacional, según datos del alcalde, que también ha destacado que el incremento cada año en reciclaje gracias a la colaboración de los ciudadanos.
En esta línea, el director general de la Junta ha destacado que Salamanca consiguió reunir 4,5 millones de kilos de vidrio el pasado año, con una media por persona de 13,5 kilogramos a lo largo de 2019.
Por su parte, el jefe de zona de Ecovidrio ha destacado la importancia de dar nueva vida al vidrio, por ser "un círculo perfecto" ya que se reutiliza en su totalidad y ayuda a cuidar el medio ambiente, y ha aplaudido que ciudades como Salamanca hayan incrementado el reciclaje de vidrio cada año.
Finalmente, el jefe de Pediatría del CAUSA ha agradecido la iniciativa pues los niños serán "los principales beneficiarios" de unas mejoras que permitirán a los menores contar con una zona más confortable y con juegos, algo que "influye sobre la evolución de la enfermedad", pues les ayuda psicológicamente, a sentirse mejor a pesar de estar en un hospital para el tratamiento.