El rector de la Universidad de Salamanca (USAL), Ricardo Rivero, ha señalado que, aunque la institución mantiene su apuesta por el modelo de "presencialidad segura" porque así "lo prefieren" estudiantes y profesores, está preparada para "cualquier contingencia" ante los datos "preocupantes" que se están dando en la sociedad sobre la propagación de la pandemia.

En un encuentro con los medios de comunicación posterior a la reunión del Consejo de Gobierno de la USAL, Rivero ha destacado el interés de la institución por trabajar "con todas las capacidades" en la protección de la salud y en la calidad de la educación.

Por ello, ha insistido en el "esfuerzo" de los centros y de su personal para continuar con la presencialidad segura "mientras las circunstancias lo permitan", un objetivo que "supone un esfuerzo doble o triple" porque la tarea habitual va acompañada de otras medidas como la disminución de los grupos presenciales, el uso de cámaras y otras tecnologías, y distintas adaptaciones para cumplir con la normativa y para evitar la propagación de la COVID-19.

Además, ha mostrado el compromiso también de los estudiantes, que queda patente, según el rector, en que los contagios se están dando "fuera" de las aulas, "en la vida social" de "una minoría de irresponsables e inconscientes que hacen tanto daño" y a los que ha pedido que cambien "su proceder".