Los padres y madres de la educación pública lamentan que el debate de la nueva ley se centre solo en aspectos puntuales
La Federación de Ampas de centros públicos de la provincia de Salamanca ha emitido su opinión sobre la nueva ley educativa, la LOMLOE. Al respecto, afirman sentirse reconfortados por el apoyo que se da a reivindicaciones por las que se llevan trabajando años.
De esta manera, aplauden "que el Consejo Escolar retome su capacidad ejecutiva y de decisión, que se evidencie que las administraciones públicas deben luchar, trabajar y apostar por la educación como derecho principal de nuestros menores, que desaparezca el programa PMAR en favor de la Diversificación donde se vuelve a trabajar con el alumnado en 3º y 4º ESO o que se apueste por un aprendizaje basado en competencias y que se abra la posibilidad de una modificación en el currículo".
Además, también celebran que "se entienda que la segregación nunca se puede enmascarar dentro de una organización escolar y que la coeducación debe ser tan real en el contexto educativo como lo debería ser en la realidad, que la búsqueda de la igualdad de oportunidades sea para todos/as, atendiendo a sus características y necesidades, que definitivamente se elimine la idea de realizar unas reválidas frente a las evaluaciones de diagnóstico y que, como estado aconfesional que somos, la materia de Religión no forme parte de la organización y desarrollo curricular para la obtención de méritos calificativos".
Sin embargo, más allá de estos avances, sí critican que la ley está amenazada debido la política y que no surge de un trabajo de reflexión y colaboración. "Una vez más, el debate se centra en aspectos puntuales que nada tienen que ver con una organización de la enseñanza coherente con la realidad social y económica en la que vivimos y no hay un planteamiento curricular y metodológico firme que nos lleve a una educación liberadora en la que las personas crezcan en la capacidad de autogestión y resolución creativa de su propia vida".
Tampoco se muestran partidarios de que la ley llegue "a través de lecturas parciales donde parece que el único debate posible es concertada sí o no, religión sí o no o catalán sí o no". Y es que según comentan, "la educación va mucho más allá, por lo tanto su legislación también lo debería de hacer".
Además, "la normativa que estructura el desarrollo educativo no afronta la necesidad de modificar significativamente la formación del profesorado, artífices de todo posible cambio y mejora de nuestro sistema" y se ponen "arreglos puntuales a lo que el partido gobernante considera erróneo en la ley educativa anterior".