El alcalde de Salamanca, Carlos García Carbayo, ha presentado este martes una nueva medida en materia de tráfico y de movilidad, a través de la cual un total de 214 vías de la ciudad, agrupadas en doce zonas, se convertirán en calles residenciales, lo que implicará que la velocidad máxima de circulación permitida se reducirá a 20 kilómetros por hora.
En una rueda de prensa celebrada, el regidor salmantino ha concretado que la implantación de estas doce zonas residenciales se llevará a cabo en un periodo máximo de tres meses, que empezará a contarse dentro de los próximos días y hasta finales del mes de febrero, que es el tiempo que empleará el ayuntamiento en la colocación de la preceptiva señalización vertical y horizontal que haga reconocibles estas calles.
Según ha detallado, en este mes de diciembre, seis de esas zonas ya estarán en funcionamiento. En concreto, se trata de las zonas del Barrio de San José, Barrio de La Vega, Ciudad Jardín, Barrio del Carmen, Barrio del Rollo y Puente Ladrillo, a las que se sumarán, entre enero y febrero, las zonas situadas en los barrios de Pizarrales, Garrido Norte, Barrio Blanco, Barrio del Oeste, Barrio de San Vicente, así como la Calle Crespo Rascón y sus alrededores.
En detalle, en el Barrio de San José se reducirá la velocidad a 20 Km/h en 14 calles; mientras que en el Barrio de la Vega la medida se aplicará en 15 calles; en Ciudad Jardín llegará a cuatro vías; en el Barrio del Carmen a 12; en el Barrio del Rollo a 17; y en Puente Ladrillo se extenderá a un total de 16.
Por otra parte, en el Barrio de Pizarrales 35 vías se convertirán en calles residenciales; otras 18 lo harán en Garrido Norte; 24, en el Barrio del Oeste; 14, en el Barrio de San Vicente; y otras 20 calles reducirán su velocidad a 20 Km/h en Crespo Rascón y su entorno.
Medidas ambiciosas a favor del peatón
Durante la presentación, García Carbayo ha comentado que con la implantación de estas zonas residenciales, el Ayuntamiento de Salamanca da un paso más allá de lo previsto en el Real Decreto 1428/2003, aprobado el pasado 10 de noviembre por el Consejo de Ministros, y por el que se modifica el Reglamento General de Tráfico, incorporándose nuevos límites de velocidad en las vías urbanas.
Tal y como ha explicado, en el citado Real Decreto, se contempla una reducción a 20Km/h para las vías que dispongan de plataforma única de calzada y acera, una cuestión que no afecta a Salamanca, donde las calles con plataforma única están peatonalizadas en casi su totalidad, lo que permite a la ciudad ser “más ambiciosa” en el triple objetivo de dar más protagonismo al peatón, fomentar el uso de transportes alternativos que permitan reducir la contaminación, y fortalecer la seguridad vial para reducir accidentes de tráfico y atropellos.
Con la implantación de estas zonas residenciales, Salamanca da “una vuelta de tuerca a las políticas de movilidad para situar al peatón en el centro de las acciones, no solo en las zonas patrimoniales, donde ya tiene total protagonismo, sino también en los barrios de la ciudad”, ha dicho el alcalde.
A través de esta iniciativa, los peatones tendrán preferencia en el uso de toda la zona de circulación, donde incluso podrán jugar o realizar deportes, sin estorbar de manera innecesaria al tráfico, ha agregado García Carbayo, quien además ha avanzado que la Policía Local ha diseñado sendos planes, uno Estratégico y otro de Calidad, que ponen el acento en la información cercana, para garantizar que vecinos, comerciantes y demás transeúntes conozcan estas modificaciones.
Para ello, ha señalado que habrá presencia de los agentes a pie de barriada, con el fin de atender las dudas que pudieran surgir en torno a esta medida y, también, para controlar de forma preventiva el correcto cumplimiento del nuevo límite de velocidad.