Izquierda Unida a través de su concejala en el Ayuntamiento de Salamanca, Virginia Carrera, ha presentado una serie de alegaciones al Reglamento del Defensor del Mayor del Ayuntamiento de Salamanca, aprobado por el Pleno celebrado el pasado 13 de noviembre.
El objetivo de las alegaciones presentadas por la formación de izquierdas, según indican, es "adaptar el Reglamento a un lenguaje inclusivo que nombre a hombres y mujeres en todo momento, así como el de dotar de herramientas al Defensor/a del Mayor para la prestación de asesoramiento, información, atención y ayuda a los mayores de la ciudad y asociaciones en sus relaciones con la administración municipal y el resto de los organismos y entidades dependientes de la misma. También entiende que hay que reflejar una serie de incompatibilidades con el cargo y así lo refleja en las aleaciones".
Carrera considera que la pandemia de la COVID-19 ha puesto de manifiesto la necesidad de proteger a nuestros mayores del desamparo, ante situaciones tan dramáticas como las vividas en los últimos meses. En palabras de Carrera “la pandemia y las crisis nos visibilizan la importancia de proteger y cuidar a nuestras personas mayores, la figura del Defensor/a tiene que servir para esto”
En la actualidad la ciudad cuenta con cerca de 50.000 personas mayores de 60 años, de los cuales, alrededor de 18.000 viven solas, la figura del Defensor/a del Mayor ha de ir encaminada a proteger y reivindicar los derechos, libertades y necesidades de las personas mayores.