ASPER pide la dimisión de Sánchez Galán como presidente del Consejo Social de la USAL
Tras conocer la imputación de Ignacio Sánchez Galán, presidente de Iberdrola, por supuestos encargos de espionaje al excomisario Villarejo, en el marco de la operación llevada a cabo por la Audiencia Nacional y la Fiscalía Anticorrupción, la Asociación Progresista de Estudiantes Renovadores (ASPER) ha exigido su inmediata dimisión como Presidente del Consejo Social por “respeto a la institución universitaria”.
ASPER señala que el Consejo Social, órgano de participación de la sociedad en la Universidad de Salamanca y de supervisión de sus actividades de carácter económico, como sería la aprobación misma de sus presupuestos, “debe estar integrado por personalidades intachables a las que exigir dar ejemplo de pulcritud en su comportamiento”. Desde la Asociación progresista consideran intolerable y escandaloso el recurso a las “cloacas del Estado” para la obtención de un beneficio empresarial privado, en detrimento de la competencia y preservación del interés general.
“El presidente del Consejo debe ser una persona de prestigio que represente a la sociedad castellana y leonesa y no alguien que esté imputado por hechos tan graves”, declara Emilio Ferrero, presidente de ASPER. Igualmente, reiteran su respeto a la presunción de inocencia, pero descartan que pueda esgrimirse como excusa para impedir lo que consideran “un daño irreparable a la imagen de la Universidad de Salamanca“, para lo que demandan decoro y responsabilidad. Por ello, reclaman a la Junta de Castilla y León su cese en caso de que Sánchez Galán se niegue a dimitir, instando al Rector a solicitar al gobierno autonómico su destitución para “preservar el buen nombre de la Universidad de Salamanca y el prestigio de sus ochocientos años de institución”, concluyen