La consejera de Sanidad de la Junta de Castilla y León, Verónica Casado Vicente, ha visitado  hoy las instalaciones del nuevo Hospital Universitario de Salamanca, que con una inversión de 290 millones de euros (divididos entre 210 de la infraestructura y 80 de equipamiento) se suma al Complejo Asistencial Universitario de Salamanca como eje principal de la atención sanitaria del Área de Salud de Salamanca y referencia regional (en trasplantes, cardiopatías congénitas y diagnóstico de enfermedades raras, entre otros) y nacional (como uno de los ocho hospitales autorizados para terapias CAR-T). Los usuarios y profesionales dispondrán de un complejo asistencial más amplio, moderno, confortable y tecnológicamente avanzado gracias a este nuevo edificio.

La superficie construida es de 87.343 metros cuadrados, con una zona de hospitalización de 28.618 m², una zona para pruebas diagnósticas de 9.250 m², una zona quirúrgica de 6.214 m² y 5.258 m² para Urgencias, a los que se sumará el nuevo edificio de consultas que se edificará en el espacio del Hospital Clínico, quedando una parte para futuras expansiones, pensando en las necesidades que vayan surgiendo.

La nueva estructura ha sido diseñada para transformar y consumir la energía de forma sostenible con el medio ambiente, y cuenta con una tecnología integral de última generación, lo que permitirá que el edificio también se adapte, con flexibilidad, a las nuevas necesidades tanto asistenciales como logísticas.

Características más importantes

Las características más importantes de este nuevo centro asistencial de la Junta de Castilla y León se podrían resumir en:

Funcionalidad y comodidad para usuarios y profesionales, facilitando el trabajo diario y centrándose en la mejor atención asistencial, humanizada.

Seguridad frente a agentes externos e internos, con una evacuación segura del edificio en situaciones de emergencia o urgencia.

Ergonomía del edificio, entendida como una arquitectura que tiene en cuenta al ser humano; una humanización de los espacios, de las acciones y del trato, con la comunicación como eje (tanto con los usuarios como entre los profesionales, así como con la sociedad en general).

Flexibilidad de usos y capacidad de realizar cambios que conlleven la introducción de nuevos equipos, tecnologías o nuevos procesos, con presteza, calidad y calidez.

La búsqueda óptima de la gestión de camas, pensando en los hospitales líquidos, que se adaptan a los pacientes, buscando que los procesos y las estancias hospitalarias sean las menores posibles, tendiendo a una disminución en la estancia media, potenciando los hospitales de día y la hospitalización domiciliaria.

Los datos generales indican que las plazas totales de aparcamiento previstas serán 1.519, duplicando las que hay actualmente. Además, cuenta con un helipuerto para dar cobertura a los aparatos del Servicio de Emergencias Sanitarias de la Junta de Castilla y León. La estructura se divide en diferentes bloques o peines (denominados de la “A” a la “J”), en los que se ubican los distintos servicios, y todas las estancias están perfectamente señalizadas para que tanto los usuarios como los profesionales puedan ubicarse y desarrollar los circuitos marcados.

El nuevo Hospital Universitario de Salamanca cuenta con 507 habitaciones. De ellas, 286 serán dobles y 221, individuales. El total de camas es de 863. Los castellanos y leoneses van a disponer en este centro de 25 quirófanos de última generación, con un modernizado sistema de integración quirúrgica que permitirá la grabación y distribución de imágenes y datos generados en ellos, incluyendo copias de seguridad y almacenamiento de imagen diagnóstica. Se trata de una solución innovadora que convertirá al Hospital de Salamanca en referente en la gestión y difusión de contenidos de las intervenciones quirúrgicas para un mayor desempeño y rendimiento médico, que abre infinitas posibilidades formativas al sector sanitario. Además, entre los quirófanos específicos destaca el híbrido, con tecnología punta en la rama, siendo el último modelo de este tipo de los montados en España.

Hay que destacar también otros espacios, como las 170 consultas, los 98 puestos de Hospital de Día (36 Onco-Hematológico, 12 Cardiológico, 9 Pediátrico y 41 Médico), los 72 puestos de Reanimación o los 12 puestos del Bloque Obstétrico, mientras que en Diálisis hay 46 puestos (5 agudos, 35 crónicos, 4 infecciosos y 2 peritoneal).

Además hay que mencionar los equipos para el diagnóstico por la imagen:

  • Tres Resonancias Magnéticas.
  • Tres TAC. 
  • Dos Telemandos.
  • Siete equipos de radiología convencional (1 pediátrica).
  • Siete salas de ecografías (1 pediátrica).
  • Dos de radiología intervencionista
  • Tres mamógrafos y tres ecógrafos (Unidad de Mama).

En Medicina Nuclear habrá tres gammacámaras, un densiómetro y un PET-TAC, mientras que Oncología Radioterápica está equipada con dos aceleradores lineales más un búnker, un acelerador de tomoterapia, un simulador TC, una braquiterapia de alta tasa, una sala de técnicas especiales y una dosimetría – moldeado láser. Las salas de hemodinámica se dividen en: dos de hemodinámica, dos de electrofisiología, tres ecos, un TAC y una resonancia magnética nuclear.

Laboratorio

La zona del Laboratorio Unificado ha tenido un crecimiento desde 1.988 metros cuadrados que tenían en su totalidad en el antiguo edificio, hasta los 2.591,25 metros cuadrados del nuevo espacio. En él que se realizan ya todas las pruebas del Área de Salud de Salamanca, con las peticiones analíticas de Atención Primaria, Hospitalización, Consultas Externas y Urgencias, lo que supone un total de en torno a catorce millones de pruebas al año.

Esta nueva infraestructura aúna los servicios de Análisis Clínico/Bioquímica Clínica, Hematología, Microbiología, Alergología y Farmacia, e incorpora la tan anhelada petición electrónica. Además, el laboratorio Core tiene un sistema robotizado que ofrece la máxima integración existente en un laboratorio automatizado de estas características en España; que sume tantos servicios.

Asimismo, la Central de Esterilización conlleva un equipamiento de última tecnología que la convierte en una de las más modernas de toda Europa basando sus premisas en los conceptos de doble barrera sanitaria y marcha hacia delante. Con este cambio se va a mejorar sustancialmente tanto la ergonomía de los trabajadores como la calidad final del procesado. Todo ello con la meta de instaurar un moderno sistema de trazabilidad informática hacia el final de año, y la consecución del modelo de calidad ISO 9001.

La Farmacia también está automatizada y la dotación tecnológica de última generación, en forma de robot de almacenamiento y dispensación, permite una reorganización y mejora de los procesos.

Por último, es muy destacable la Cocina Central de línea fría, ya en marcha en muchos hospitales españoles y que está en funcionamiento desde diciembre del año pasado dando servicio a los distintos edificios del complejo asistencial salmantino. Dispone de una instalación anexa, que se encuentra en el denominado Edificio de Gestión, que se centra en la seguridad alimentaria, es decir, garantizar a pacientes y usuarios la máxima reducción de riesgos microbiológicos en su alimentación.

Se trata de una instalación que cumple con la legislación vigente en materia higiénico-sanitaria para la restauración social y colectiva, y que se centra en el concepto de que las comidas hospitalarias son parte del tratamiento y están prescritas por los facultativos e incorporadas por los dietistas. Además existen controles de trazabilidad que permiten hacer seguimiento de los alimentos, desde su preparación hasta la llegada al paciente.

Todo esto tan sólo sirve como ejemplo del gran equipamiento que se encuentra en el nuevo Hospital de Salamanca, que es de última generación, convirtiéndolo en uno de los más modernos del país.

El traslado: Las Fases

En los últimos meses se han estado equipando las distintas salas del nuevo hospital, gestionando los permisos pertinentes y planificando el traslado de los servicios y unidades. El traslado de la Fase 1 se ha ido materializando como estaba marcado.

Anatomía Patológica, el Hospital de Día Onco-Hematológico, la Central de Esterilización, el Laboratorio Unificado, la farmacia para pacientes externos, Rehabilitación, Oncología Radioterápica y la Cocina Central, ya están  funcionamiento. Al mismo tiempo, en estos días se están realizando movimientos de servicios centrales, que están cumpliendo parte de sus labores ya en el novedoso edificio, como Documentación,  Informática o Diagnóstico por imagen.

El traslado en dos fases tiene que ver con que los primeros servicios, los centrales, que son los que dan soporte a toda la organización, deben estar ya funcionando de forma óptima antes de mover el resto. Y el traslado no parará en agosto. Se continuarán moviendo equipos, soportes y prosiguen las formaciones (en plantas, en quirófanos…), todo para asegurar el comienzo de actividad de los demás servicios en septiembre. Agosto será un mes de actividad en el nuevo Hospital, de retoques, de perfilar acciones y de trasladar equipos. Un tiempo necesario de perfeccionamiento de los servicios centrales, en su desarrollo y estructuración.

En septiembre se va a trasladar la llamada Fase 2, tras la Fase 1 ejecutada en julio (y la Fase 0, que fue la realizada a finales del año pasado). Esta segunda fase se subdivide, a su vez, en dos: la A es el traslado de toda la actividad hospitalaria del Virgen de la Vega al Nuevo Hospital. Lo que se busca con esto es que siempre estén funcionando dos hospitales, uno como soporte del otro, por si hubiera incidencias. Después, cuando ya estén asegurados esos servicios, se comenzará a trasladar la actividad del Hospital Clínico, con el Nuevo Hospital (Urgencias, quirófanos, Reanimación, hospitalización… y los demás servicios nucleares) como soporte.

Desde que comenzó la actividad en la nueva infraestructura, más de 5.000 usuarios ya han pasado por él. El nuevo Hospital Universitario de Salamanca ya es una realidad.