Salamanca pone en marcha del 'Proyecto Edades', que se lleva a cabo por iniciativa de la Universidad de Salamanca y el Ayuntamiento de capital, que firman un convenio de colaboración que aporta las directrices del proyecto, el compromiso institucional y la financiación del mismo. Así se ha dado a conocer hoy durante una rueda de prensa en la que han participado el alcalde de Salamanca, Carlos García Carbayo, y el coordinador del proyecto, Ángel Luis Montejo, acompañados por las concejalas de Salud Pública, Participación Ciudadana y Mayores, María José Fresnadillo, Almudena Parres e Isabel Macías, respectivamente, así como por los presidentes de Famasa y de la Asociación de Vecinos de Puente Ladrillo, Francisco Gómez y Julio Pérez, entre otros asistentes.

El proyecto 'Edades' es un conjunto de acciones enmarcadas en la investigación e intervención, de carácter integral, en el ámbito del deterioro cognitivo leve y fases iniciales de la enfermedad de Alzheimer. Como explicó el doctor Montejo, está dirigido a la población mayor de 55 años susceptible de desarrollar deterioro cognitivo leve (DCL) y/o fases iniciales de la enfermedad de Alzheimer, aquellas en las que los factores relevantes convierten un Deterioro Cognitivo Leve (DCL) en una demencia.



Según los datos y epidemiología de la ciudad de Salamanca, unas 9.562 personas mayores de 65 años sufren algún tipo de discapacidad. De ellas, 7.650 son susceptibles de presentar deterioro cognitivo leve y 1.912 estarían afectadas por un deterioro más grave.



Por ello, como apuntó Carlos García Carbayo, "entre todos buscamos soluciones de la ciencia que lleguen a las personas". Con este tipo de proyectos, apuntó el alcalde, "Salamanca demuestra que se puede avanzar mucho en hacer una vida más saludable a las personas que presentan estas patologías".

Durante su intervención, el regidor salmantino ha explicado que de los más de 150 participantes evaluados, cerca de un centenar a arrojado resultados positivos en deterioro cognitivo, siendo algo más de un 30 por ciento de ellos susceptible de recibir los tratamientos farmacológicos y no farmacológicos asociados a este programa.

Según ha manifestado García Carbayo, esto quiere decir que ese 30 por ciento de personas “ya está trabajando para asegurarse una mejor calidad de vida, gracias a que tienen un diagnóstico temprano que les pone en el camino hacia hábitos más saludables e, incluso, hacia tratamientos punteros”.

Para el alcalde, resulta “emocionante” constatar que la inversión de recursos locales en investigación y en atención a las personas de Salamanca es un acierto y que vale la pena estrechar con los desatacados investigadores de la ciudad y con la Universidad de Salamanca “para que las soluciones de la ciencia lleguen a las personas”.

Tal y como ha avanzado García Carbayo, actualmente se está reforzando con personal el equipo de trabajo para llegar a más beneficiarios. Al respecto, ha precisado que se calcula que a finales de año unas 80 personas habrán sido atendidas por los grupos de intervención.

Asimismo, ha informado de que próximamente se empezarán a llevar a cabo el resto de acciones del programa que por motivo de la pandemia aún no habían podido iniciarse. En esta línea, ha comentado que en breve comenzarán las actividades de la programación de activación física interactiva, y el programa de actividades socioculturales, así como el programa de atención a los familiares.

El doctor Montejo lanza un mensaje de “esperanza”

Por su parte el director del proyecto, doctor Ángel Luis Montejo, explicó que "el ‘Proyecto Edades’ nació de una necesidad que percibimos desde los hospitales, donde también investigamos a través de ensayos clínicos, probando nuevos tratamientos en diversas patologías. Una de ellas es la enfermedad de Alzheimer, y nos dimos cuenta de que se tarda bastante en diagnosticar a los pacientes de esta enfermedad. Por el proceso normal, en el que el paciente tiene quejas de memoria y va al médico de cabecera tras esperar un tiempo, ya suele haber síntomas evidentes".

"Con este proyecto ya detectamos si los pacientes pueden realmente ser susceptibles de recibir más estudios para diagnosticar una posible enfermedad de Alzheimer precoz en fases tempranas. Además, somos nosotros quienes buscamos a los pacientes, o bien les damos la posibilidad de que nos encuentren muy pronto. Prácticamente no tenemos lista de espera porque somos un grupo de bastantes profesionales", explica Montejo. 

Para quien "la detección precoz del DCL es clave para poner en marcha medidas de prevención y tratamientos que puedan anticiparse a un mayor deterioro o el desarrollo de una demencia, con mayor probabilidad una demencia tipo Alzheimer. La realización de una valoración integral tiene como objetivo la obtención de índices que describan el estado de la persona en su proceso de envejecimiento", asegura

Finalmente, Ángel Luis Montejo explicó que los grupos de trabajo con pacientes también ampliará el número de participantes, pasando de los cinco actuales al doble, como consecuencia de la mejora de la situación epidemiológica, siempre preservando la seguridad sanitaria. Estos grupos, cuatro en la actualidad, han llevado a cabo por el momento un total de 68 sesiones, siendo tres de estos grupos integrados por participantes con un deterioro cognitivo leve y uno de ellos, por personas en un estado de deterioro algo más avanzado.

El doctor Montejo ha lanzado un mensaje de “esperanza” y ha subrayado que el objetivo del proyecto es cambiar la percepción de la palabra ‘Alzheimer’ para que deje de evocar la sensación de una situación que no tiene solución, tal y como ha ocurrido hace unos años con el cáncer.



Intervención



El tratamiento para este tipo de enfermedades degenerativas es la combinación de tratamientos farmacológicos y no farmacológicos. Para ello, desde el proyecto aplican "un programa de intervención integral que comprende la estimulación cognitiva y las intervenciones que activan otras áreas de la persona como las actividades de la vida diaria, la participación social, la activación emocional, la información sobre el funcionamiento cognitivo y factores intervinientes en el deterioro como el ejercicio físico, la nutrición, planificación, etc".



El proyecto Edades va a suponer el control del estado cognitivo, además de otras variables biopsicosociales, desde el comienzo de la intervención hasta los 4 años de seguimiento.