El nuevo obispo de Salamanca-Ciudad Rodrigo, José Luis Retana Gozalo, nombrado como tal en el día de ayer por el Papa Francisco, avanza que, "dada la complejidad de dos Diócesis, viviré en los dos sitios, mitad en Salamanca y mitad en Ciudad Rodrigo, sin un plan previsto de antemano".
Aún pendiente de su toma de posesión, traza un plan de actuación para hacer frente al malestar creado, sobre todo en Miróbriga, que teme la desaparición de la Diócesis. A este respecto, asegura que "esta mañana llamaré al alcalde de Ciudad Rodrigo", sobre todo para "garantizarle que la Diócesis no desaparece, sino que es el nombramiento de un obispo para dos diócesis complentamente diferenciadas, en cuanto a su funcionamiento y estructura jurídica, tal como ocurre en la de Huesca-Jaca".
Además, en el día 23 mantendrá un reunión con los arciprestes y con los sacerdotes, sobre todo para "conocer la situación de las diócesis, ya que en enero tenemos que enviar a Roma un informe de todas las diócesis". Sobre este propósito, una vez conocido su nuevo cometido, ha recordado que ya al llegar a Plasencia estuvo viendo a los sacerdotes de su zona "uno por uno", lo que le llevó cinco semanas en una tarea que le ayudó a "ver la situación y conocer a los sacerdotes".
En cuanto a la distancia, Retana Gozalo asegura que "no es impedimiento alguno, ya que es una hora de viaje entre una ciudad y otra, y ahora, como obispo de Plasencia, tenía que viajar a Don Benito, por ejemplo, y es una distancia de 1.45 horas, y pregunten ustedes si ha existido algún problema".
Los problemas, en cuanto a estancia en una ciudad u otra, vienen, "por decir algo, cuando llegue, por ejemplo, Semana Santa, donde estaré el Jueves Santo, el Domingo de Ramos, el Domingo de Resurrección, que será una tarea difícil".
Casa abierta en ambas ciudades
"Tendré casa abierta en Salamanca y en Ciudad Rodrigo", ha añadido en un encuentro donde ha explicado su intención de verse el 23 de noviembre en Ciudad Rodrigo con arciprestes y con el consejo de consultores y, un día después, mantener una agenda similar en Salamanca, para ver "las necesidades de cada diócesis".
Por ello, ha remarcado que no llega a Ciudad Rodrigo y a Salamanca con "plan previsto", pues su interés en hablar antes con los representantes de cada lugar, y ha añadido la importancia del trabajo en equipo, ya que un obispo "no llega solo" y lo hace a diócesis donde hay vicario general, vicario de Pastoral y delegaciones con las que "seguir caminando".
José Luis Retana, como ya hiciera 24 horas antes, en el día de la comunicación de la decisión de la Santa Sede, ha mostrado su "disponibilidad" para la nueva tarea que el Papa Francisco le ha encargado para este "futuro próximo", pues su intención es estar ya en las nuevas diócesis a finales del presente mes.
Su salida de Plasencia
Sobre su salida de Plasencia, ha reconocido que le da "pena" marcharse, como ya le ocurrió cuando abandonó Ávila de sacerdote para su nueva responsabilidad de obispo. "Pensaba que me iba a quedar allí hasta el final", ha añadido pensando en ese paso que ya dio hace cuatro años.
De nuevo, en relación con los años en Plasencia, en los que "casi la mitad" han sido ya en tiempos de pandemia, ha reflexionado sobre "muchas cosas en marcha y abiertas". "Me duele salir", ha reconocido en unas palabras donde también ha asegurado que afronta su nueva misión con "toda" su "voluntad" y "potencia".