El PSOE denuncia el "abandono sanitario" de Salamanca en el peor momento de la pandemia

El PSOE de Salamanca ha denunciado, a través de un comunicado, “el abandono sanitario de la provincia en el peor momento. El presidente de la Junta de Castilla y León ha decidido no hacer nada, abandonando a su suerte a los salmantinos, precisamente cuando asistimos al mayor brote de casos de Covid-19 desde que comenzó la pandemia”.

Según los socialistas, “en cada oleada de la pandemia, nos hemos acostumbrado a que los datos de nuestra Comunidad siempre estén entre los más negativos a nivel nacional, resultando especialmente preocupante el alto incremento de ingresos hospitalarios. La provincia de Salamanca no es excepción; al contrario, estamos sufriendo la pandemia con especial virulencia. Cada nuevo embate del virus muestra con mayor claridad la vulnerabilidad y, lo que es peor, la soledad de los ciudadanos de nuestra provincia para afrontar la enfermedad”.

Una circunstancia que consideran que sucede porque “llevamos décadas sufriendo los recortes del Partido Popular, y la Sanidad pública se ha resentido de manera muy intensa en los últimos años, caracterizados por una gestión nula, una injustificable falta de previsión de plantillas laborales y la clamorosa falta de compromiso de Mañueco y el PP con la Sanidad, uno de nuestros mejores valores y, con seguridad, nuestro mayor factor de cohesión social y territorial”.

Grave deterioro del sistema sanitario

Desde el PSOE han añadido que “son años de maltrato al personal sanitario: médicos y enfermeras se trasladan a otras comunidades huyendo de la precariedad que les ofrece la Junta: contratos de una semana a enfermeras, incluso en estos momentos críticos sigue habiendo contratos médicos de uno o dos meses, siempre sin el menor incentivo ni motivación”.

Algo que se convierte en “colas eternas bajo el frío a las puertas de los centros de salud, peticiones de cita telefónicas sin respuesta alguna, desaparición de servicios hospitalarios de nuestra provincia, listas de espera interminables para intervenciones o consultas, bajas o vacaciones de personal sanitario que no se cubren, así como la permanente amenaza de la desaparición y cierre de los consultorios rurales”.