La Lonja de Salamanca, que se celebra todos los lunes, se ha hecho eco de las manifestación y la consiguiente polémica sobre las declaraciones del ministro de Consumo, Alberto Garzón, y, a propuesta de Asaja, la Lonja ha declarado "persona non grata" al ministro y, de paso, ha exigido su dimisión por unas declaraciones "inaceptables", según un comunicado remitido por la propia Lonja.
Estas declaraciones de Alberto Garzón, motivo de la polémica, ponían en duda la calidad de la carne procedente de las explotaciones de ganado intensivo. Por ello, reza el comunicado, "Conocedores de la sensibilidad de los mercados y de las dificultades que conlleva entrar en ellos y consolidarse, la Lonja salmantina pone de manifiesto el daño que este tipo de acciones, ya habituales en este ministro, que actúa más como activista que como representante público, suponen para el sector ganadero en particular y para todo el sector agroalimentario en particular”.
Los vocales de la Lonja de Salamanca aseguran que las declaraciones de Garzón "denotan un profundo desconocimiento del sector ganadero en nuestro país, profundamente comprometido con la sostenibilidad ambiental y el bienestar animal".