Unión del Pueblo Leonés (UPL) desarrolló sendos actos de campaña en Vitigudino y Lumbrales, con los que los leonesistas han iniciado la campaña electoral en el noroeste salmantino, y que contaron en ambos casos con la presencia e intervención del presidente del partido, el guadramirense Carlos Javier Salgado, así como, en el caso de Lumbrales, con la del cabeza de lista por la provincia, Luis García Sánchez, que por problemas de agenda no pudo estar presente en el acto de Vitigudino.
En dichos actos, los leonesistas hicieron un análisis de la evolución socioeconómica de las provincias de Salamanca, Zamora y León desde su inserción en la comunidad autónoma de Castilla y León en 1983, en los que la Región Leonesa ha perdido más de 170.000 habitantes, e incidieron en datos como la acusada despoblación de la Raya, que ha perdido la mitad de su población en periodo autonómico.
Por ello, manifestaron la necesidad de que los fondos transfronterizos se gasten íntegramente en La Raya “dada la urgencia de dar futuro a unas comarcas que agonizan, mientras la Junta y el Gobierno miran hacia otro lado, y rechazan nuestra propuesta de un Plan especial de Desarrollo de la Raya”.
Asimismo, desde Unión del Pueblo Leonés expusieron en Lumbrales y Vitigudino diversas iniciativas y propuestas para mejorar los datos de Salamanca, Zamora y León, incidiendo en la necesidad de dotar de buenos servicios a las comarcas rurales para asentar y fijar población, apuntando que “la administración debe dotar de una vez de UVI móvil al noroeste salmantino, han de abrirse todos los consultorios, sin excepciones, y dar una mayor y mejor atención sanitaria en nuestras comarcas que evite desplazamientos innecesarios, para lo cual proponemos que el Centro de Salud de Vitigudino se reconvierta en Centro de Especialidades”.
Por último, entre los actos desarrollados en Vitigudino y Lumbrales, miembros de Unión del Pueblo Leonés estuvieron en la villa de Guadramiro, en una visita de corte simbólico, al haber sido la formación leonesista clave mediante su presión en Cortes para el reconocimiento como Bien de Interés Cultural (BIC) de la Torre de Guadramiro, habiéndose desinsectado el retablo de la iglesia parroquial guadramirense, que poseía problemas con la carcoma, gracias a otra partida presupuestaria de Unión del Pueblo Leonés, que manifestaron sentirse “orgullosos de poder ser útiles a nuestra tierra”.