El Partido Animalista PACMA ha denunciado el ataque a otra colonia felina gestionada por voluntarios en Salamanca. Las casetas de refugio para los animales fueron destrozadas o tiradas al río. Varias personas atestiguaron lo sucedido y trasladaron sus quejas al Ayuntamiento.
Es el segundo ataque registrado a una colonia felina en menos de un mes en Salamanca, y en menos de una semana en España. PACMA denunciaba hace apenas unos días el envenenamiento con raticida de una colonia de más de 100 gatos en Benidorm después de que varias casetas hubieran sido calcinadas en un incendio provocado en otra área de refugio de felinos en Salamanca tras las declaraciones del biólogo Max Benito: "a los gatos hay que matarlos".
En Almería, la otra punta de España, aparecía a principios de marzo un gato callejero con una botella recortada pegada a la cabeza con pegamento. El animal pudo ser rescatado pero ya era demasiado tarde y falleció debido a la inanición, las heridas infectadas y las abrasiones que presentaba en la cara.
Desde PACMA advierten que esta oleada de ataques contra los felinos es solo lo que se ve: "estamos denunciando casos gracias a que nos avisan los gestores y las personas preocupadas por el estado de los animales, pero hay muchísimos gatos en situación de desamparo que no son atendidos por nadie y que sufren vandalismo sin que se sepa".
Desconocimiento y fobia.
Bulos y mitos sobre los gatos, una causa de los ataques
El Partido Animalista asegura que la cantidad de bulos y mitos sobre los gatos están potenciando los ataques contra los más desprotegidos, que viven en las calles y dependen de la mano humana para alimentarse. Muchos de ellos son sociables con las personas.
"En toda España se está haciendo un trabajo titánico para controlar las colonias felinas a través del método CER (captura, esterilización, retorno) y, en la mayoría de los casos, ni siquiera se hace con ayuda del ayuntamiento" declara la formación animalista, "son los voluntarios y las personas con sensibilidad hacia estos animales quienes les alimentan y llevan al veterinario para esterilizar, desparasitar o vacunar".
La desinformación sobre los problemas de higiene, las enfermedades o las afecciones sobre la fauna autóctona están provocando ataques que, en muchas ocasiones, acaban con los animales muertos.
"La gente debe saber, por una parte, que es un delito menoscabar la salud de los animales domésticos" explica PACMA, "si bien las penas deberían ser mucho más altas, lo cierto es que nadie puede perpetrar estos ataques; si se tienen problemas o quejas hay que dirigirse al ayuntamiento y abordar el asunto para buscar una solución que no afecte negativamente a los animales".
Por otra parte, la formación animalista afirma que el procedimiento general de control de colonias felinas a través de la esterilización tiene una eficacia comprobada. La colonia controlada tiende a desaparecer de forma natural y en poco tiempo, ya que los individuos fallecen de forma natural debido a los permanentes peligros de la calle. Además, el problema de la territorialidad que produce micciones descontroladas, en la mayoría de los casos, desaparece, así como las peleas entre machos o los maullidos de las hembras en celo.
Varias asociaciones de protección animal ya se han puesto en contacto con el Consistorio para trasladar lo sucedido y pedir mayor implicación para proteger a las colonias, así como a sus enseres.