J.M.A. / ICAL.- La Diputación de Salamanca presentó este miércoles una exposición instalada en la Torre de los Anaya mediante la que explora el desnudo y la figura en la obra de Ricardo Segundo. La muestra consta de más de 60 obras repartidas en dos salas con las que el visitante puede profundizar en el proceso creativo del artista, en palabras del presidente de la Salina, Javier Iglesias, “uno de los grandes referentes de la pintura española de siglo XX”.
El mandatario provincial destacó durante la inauguración celebrada hoy la colaboración interinstitucional que ha devuelto este espacio a jugar un importante papel en pro de la cultura salmantina, ensalzando que esta muestra “vuelve a dotarlo del mejor contenido, situándolo como referente en las propuestas expositivas de la región”. Una exposición “única y muy especial" con el pintor madrileño como protagonista.
Iglesias dibujó un breve perfil del artista, destacando que a pesar de haber nacido en Madrid en 1909 falleció 80 años más tarde en Zamora, provincia a la que estuvo “profundamente ligado”, especialmente a su municipio, Sejas de Aliste. “Sus obra más apreciadas muestran escenas costumbristas castellanas, motivo por el que fue uno de los grandes exponentes de la cultura regionalista”, apuntó.
Aunque su “vinculación emocional” está en tierras zamoranas, el presidente de la Salina señaló que Ricardo fue un pintor “fecundo” que se formó con “grandes maestros” como Sorolla o Romero de Torres y que perteneció a la Escuela de San Fernando en Madrid. “Quien estaba allí es quien contaba algo en el mundo del arte en España”, matizó Iglesias.
Sobre el contenido de la muestra, el presidente explicó que la figura es la clave artística de las obras. “Su pincel daba formas más sutiles a los desnudos, su especialidad. Por encima de todo era un artista enamorado de la figura humana. Hoy mostramos esa parte de su obra que tanto fascinó y que logró dominar con maestría”, añadió.
Además, Iglesias sugirió que un paseo por esta exposición servirá al visitante para ver el proceso al que el artista se enfrentaba para la creación de algunas de sus obras más importantes. “Con bocetos, pruebas, estudios previos de obras como ‘El virtuoso y las musas’ o ‘El sueño de Velázquez’, esta exposición ofrece a una oportunidad única a los salmantinos de adentrarse en el proceso creativo de uno de los grandes artistas españoles del siglo pasado”, concluyó.
El dibujo
Durante el acto inaugural también intervino Gloria García Pertejo, hija del artista y comisaria de la exposición, quien añadió unas pinceladas al perfil de su padre, recordando que obtuvo distintas becas artísticas como estudiante. Aparte de militar en la prestigiosa Escuela de San Fernando, Ricardo Segundo se formó también en los movimientos que había en el ámbito cultural del Madrid de la época en los años 20 y, posteriormente, en los 30, en Barcelona. “Fue profesor de instituto y sus primeros destinos fueron Valdepeñas y Barcelona, pero nunca abandonó la pintura. De hecho, dejó de ser profesor para seguir pintando”, matizó.
García Pertejo mencionó que la exposición consta de dos partes diferencias y algunos elementos externos que sirven como hilo conducto, incluyendo algunos “guiños a Salamanca”, donde tuvo amistades y cosechó distintas referencias en la prensa local de la época. “Tenemos un archivo familiar con 3.000 dibujos donde se aprecia que el desnudo es muy importante, ya en la época de estudiante. Aparte de los dibujos de desnudo, también hemos traído otros porque él pasaba mucho tiempo dibujando, ya que para él era la parte fundamental de la pintura”, matizó.
Aparte del dibujo academicista, en la muestra figuran las obras más trabajadas entre composición para reflejar “todo el trabajo que hay detrás”. “Él decía que el retrato es lo más difícil y donde más se aprende. Siempre llevaba consigo un cuaderno de dibujo y lo utilizaba constantemente. Era la herramienta que más usaba para después plasmar en obras grandes o simplemente por gusto”, finalizó.