La Audiencia Provincial de Salamanca condenó a dos años, seis meses y un día de prisión al conductor que atropelló mortalmente a tres mujeres el pasado 8 de julio de 2020 en la carretera N-620 a su paso por el término municipal de Pedrosillo el Ralo. La sala aprecia en su sentencia, consultada por Ical, tres delitos de homicidio por imprudencia grave y le prohíbe además conducir vehículos de motor por un periodo de cinco años, además de imponer indemnizaciones a su compañía aseguradora.
El tribunal considera probado que el condenado conducía su Citroën Xara Picasso recorriendo el trayecto desde Pajares de la Laguna, donde terminó su jornada laboral unos diez minutos antes, hacia la capital salmantina, lugar donde tenía su domicilio habitual. En un determinado momento, se desvió hacia el arcén y comenzó a circular por el mismo con la totalidad de su vehículo. Por allí paseaban, en sentido contrario a la marcha del vehículo, es decir, por su izquierda, las tras víctimas, cuyas iniciales coinciden con M.M.H.G., nacida el de 1943; J.F.F., nacida el de 1944; y M.P.G.G., nacida en 1947. A la altura del punto kilométrico 222 las tres peatonas fueron atropelladas por el Citroën, que presenta daños en la zona fronto lateral derecha. Las dos últimas fallecieron en el acto y la otra, a los pocos minutos.
La sentencia considera que el conductor no fue consciente de la presencia de las tres mujeres en el arcén hasta el momento de la colisión, por lo que no frenó el vehículo, previamente al atropello, sino una vez que tuvo lugar, y tampoco realizó ninguna maniobra evasiva para evitarlo. Destaca el documento judicial que se trata de una vía de dos carriles, uno por sentido, de 3,6 metros de ancho con un arcén de 2,4 metros por el que circulaba el condenado, un tramo de larga recta con una visibilidad de dos kilómetros en ese sentido.
A las 22.17 horas, agentes de la Guardia Civil practicaron al conductor la prueba de detección de droga con un resultado negativo y seis minutos más tarde, la prueba de alcoholemia que arrojó un resultado de 0,00. Una vez en las dependencias oficiales de la Guardia Civil, el hombre aportó voluntariamente su teléfono móvil, a fin de que los agentes pudieran acceder al listado de últimas llamadas y conversaciones de WhatsApp.
Sin embargo, ya no constaba en el registro la llamada realizada a su pareja exactamente a las 21:10 horas, con una duración de 105 segundos, por lo que terminó a las 21:12 horas. El primer aviso que consta en el Centro de Coordinación de Emergencias 112 de la Junta de Castilla y León informando del accidente fue realizado a las 21:16 segundos. Por esta razón, la sala determinó que se trata de la causa de la imprudencia grave que tuvo el fatal resultado de tres fallecimientos.