J.M.A. / ICAL. - Salamanca y Nuevo León iniciaron hoy su hermanamiento mediante un encuentro académico, cultural y artístico entre sus universidades, la Usal y la UANL, que tendrá lugar en la capital del Tormes durante los próximos días. Una delegación de unos treintaycinco alumnos y académicos mexicanos, encabezados por el embajador de México en España, Quirino Ordaz, y el rector de la institución educativa mexicana, Santos Guzmán, desembarcó hoy en el Aula Unamuno de las Escuelas Mayores.
Recibidos por el rector de la Usal, Ricardo Rivero, y el alcalde de Salamanca, Carlos García Carbayo, los mexicanos pudieron comenzar a disfrutar de la hospitalidad de la ciudad charra tras firmar un convenio de colaboración en el Salón de Retratos del Rectorado con el objetivo de favorecer la movilidad internacional y desarrollar nuevas actividades conjuntas. Tras unas palabras iniciales del Rivero, fue el regidor municipal el encargado de ofrecer la bienvenida a la ciudad a la delegación mexicana.
García Carbayo reconoció como un “enorme placer” recibir a la comitiva del país azteca en una ciudad “viva y abierta”, como definió a Salamanca, que mantiene un “histórico idilio” con aquella nación desde hace más de cuatro décadas, cuando se produjo el hermanamiento entre las localidades homónimas de ambos países. “Este nuevo intercambio cultural y científico ponen el acento en la colaboración como la forma más inteligente de construir y de construirse. Que este encuentro se celebre aquí habla bien de nuestra universidad y también de nuestra ciudad, que evoca un glorioso pasado, pero que también mira al futuro”, valoró el alcalde.
El regidor salmantino recordó que el Ayuntamiento además ha puesto en marcha recientemente acciones junto a otras ciudades mexicanas, como Jalisco, y anunció que en breve sumará nuevos colaboradores. En este sentido, agradeció “cualquier gestión” por parte del embajador, quien más tarde recogió el guante. “La Usal es la madre de las universidades hispanoamericanas. En sus 800 años de historia ha favorecido que el nombre de Salamanca sea identificable en todo el mundo. Un rancho especial para impulsar las relaciones internacionales basadas en el interés mutuo por ser mejores gracias a la cultura” manifestó Carbayo, antes de invitar a los visitantes a disfrutar de una ciudad “que piensa, divierte, aprende e inspira”.
Apoyo del embajador
Las relaciones entre México y Salamanca continuarán por buen camino en función de las palabras del propio embajador mexicano en España, Quirino Ordaz, quien tomó la palabra para reconocer que se siente “como en casa” en la capital del Tormes y en la Usal. “Muy feliz de estar en esta ciudad, en esta gran Universidad que para México representa un gran ejemplo por lo que ha forjado en estos 800 años. Y tiene muchas colaboraciones con nuestro país, como lo atestigua esta alianza”, valoró.
Ordaz se refirió al alcalde para agradecer “la gentileza y la generosidad” de la ciudadanía y le aseguró que puede contar con su apoyo para tejer nuevas alianzas con ciudades mexicanas. Borneó en este punto con que la capital del Tormes, demográficamente joven durante el curso académico, “no duerme por las noches los fines de semana”. También agradeció la recibida del rector, con quien confesó haber cenado la noche anterior en el Colegio arzobispo Fonseca. Tampoco escatimó en elogios para el alcalde por la limpieza de la ciudad y la sensación de seguridad que se respira “a cualquier hora”.
“Esta es una jornada muy importante. Ojalá pronto vayamos también a otras zonas de España para seguir dando contenido al gran mosaico cultural que tiene nuestro país”, avanzó el diplomático, reconociendo estar “muy agradecido del cariño que hay entre los pueblos”. “Estos eventos, lo que vienen a ejemplificar es lo que México siente y aprecia por este gran país, y más en esta bonita ciudad. Gracias por invitarme a atestiguar el convenio de hermanamiento”, finalizó.
Cooperación educativa
Más tarde intervino el rector magnífico de la Universidad Autónoma de Nuevo León, Santos Guzmán quien según destacó el mandatario de la Usal durante la presentación de su homólogo, dirige una comunidad académica de cientos de miles de personas, que está entre las primeras de México, “lo cual es decir que está entre las primeras de América”. Rivero elogió su “vocación de tender puentes en un espacio común de historia compartida”, pero que, según matizó, “hay que renovar cada día”.
El rector mexicano celebró que estas jornadas vienen a constatar la “estrecha colaboración” que desde hace años se viene produciendo entre ambas instituciones. Además, destacó “lo mucho que significa la Universidad de Salamanca” para el espacio académico iberoamericano. “La cooperación educativa y cultural es uno de los elementos de diplomacia de mayor tradición, mucho antes de los acuerdos políticos entre países”, subrayó, insistiendo en que “las instituciones de educación superior han sido y serán siempre un eje de desarrollo mundial”.
Por eso, esta jornada, que comprende más de una veintena de actividades académicas, culturales y artísticas “engrandece, proyecta y consolida” amabas universidades. “Obviamente somos hijos, de los más pequeños, de esta gran Universidad de Salamanca, y estamos sorprendidos y agradados por la importancia que siempre se le ha brindado aquí a la cultura mexicana. Por todo esto es motivo de orgullo estar aquí. Conocemos el valor histórico de esta universidad y agradecemos su disposición a abrir los horizontes”, refirió al rector, justo antes de invitar a la Usal a participar en marzo de 2023 en la Feria del Libro de Nuevo León
Lazos internacionales
Una invitación que fue agradecida por Ricardo Rivero, quien fue el encargado de clausurar el acto de inauguración de las jornadas. “Todas estas actividades tienen sentido por los lazos que ya unen a México y España, gracias, por ejemplo, a las personas que han trabajado en este encuentro”, refirió el mandatario académico, quien resaltó en este sentido que en el seno de la Usal llevan años estudiando las aportaciones mexicanas en muy diversos ámbitos de la enseñanza superior.
De hecho, el rector se remontó al momento histórico en que la Universidad de Salamanca estuvo regida por un mexicano. “Todos tenían los mismo derechos y privilegios procedieran de donde procedieran porque esta es una universidad de clara vocación internacional y americana”, matizó Rivero, destacando además que durante la pandemia “nunca cesó la presencia física de estudiantes mexicanos en la Usal”.