El Tribunal Superior de Justicia de Castilla y León confirmó la pena de cinco años y medio de prisión a un hombre condenado por la Audiencia Provincial de Salamanca como culpable de los delitos de corrupción de menores y distribución de pornografía infantil. La defensa recurrió argumentando quebrantamiento de normas y garantías procesales, omisión en los hechos probados y error en la apreciación de las prueba, consideraciones todas descartadas por el alto tribunal.
La Audiencia Provincial de Salamanca consideró probado en sus sentencia del pasado mes de diciembre, a la que tuvo acceso Ical, consideró probado que la dirección IP desde la que operaba el hombre había compartido seis archivos pedófilos en marzo de 2019 y otros nueve en agosto de ese mismo año. Una vez identificado, se ordenó entrada y registro en su domicilio.
Los agentes encontraron a su llegada un ordenador que estaba descargando archivos pedófilos y compartiéndolos en la red. Además, descubrieron siete discos duros con un total de 7.529 archivos de pornografía infantil, de los que ocho eran fotos y el resto vídeos. De ellos, 91 eran “de especial crudeza” porque aparecían niños de entre uno y cinco años.
Al menos 150 de los archivos de pornografía infantil fueron descargados utilizando el programa Emule, de los que 54 fueron además compartidos con otros usuarios de la red. Asimismo, 6.043 de los archivos encontrados fueron descargados y compartidos utilizando el programa Ares. En su apelación, la defensa reclamó además que el tribunal tuviera en cuenta que el condenado es "una persona de 64 años con un deteriorado estado de salud, que carece estudios secundarios y sin conocimientos informáticos".