Un trabajador falleció en la tarde de ayer tras sufrir una caída de cinco metros al intentar retirar una placa de uralita en la localidad salmantina de Béjar. El obrero fue trasladado al hospital de Salamanca en un helicóptero medicalizado donde, posteriormente, falleció, según confirmó el Servicio de Emergencias del 1-1-2. Desde
Comisiones Obreras de Salamanca mostraron a través de un comunicado su “consternación y preocupación” por este accidente mortal, que calificaron de “auténtica tragedia que no es fruto de la fatalidad”.
Con estas palabras se refirió la responsable del sindicato Hábitat de CCOO en la provincia, María Dolores Fernández, quien añadió que “son accidentes laborales que son totalmente evitables”. Desde el sindicaron exigieron un mayor compromiso por parte de los empresarios respecto a la seguridad y a la salud de sus trabajadores, además de una “estricta vigilancia” de las administraciones competentes en prevención de riesgos laborales, con el objetivo de que “empresarios negligentes no tengan la percepción de que su irresponsabilidad pueda quedar impune”.
Esta muerte supone la tercera en la provincia de Salamanca en lo que va de año. Además, en la tarde de ayer, la localidad de Béjar sufrió otro accidente en el que, según el sindicato, un trabajador perdió un brazo debido al atrapamiento en una máquina mientras la limpiaba.
CCOO calificó los datos de siniestralidad en la provincia como “preocupantes”, ya que se aprecia un “ascenso generalizado” respecto al mismo período interanual para 2021, siendo el sector agrario el que más incremento ha experimentado con un ascenso del 26,85 por ciento y 29 siniestros. Por su parte, el sector industria refleja una subida del 8,15 por ciento con 26 accidentes más; servicios, el 22,91 por ciento con 144 percances; y el de la construcción, un 22,91 por ciento con una subida de 52 accidentes.