J.M.A. / ICAL

Salamanca se blindará contra la sumisión química durante la celebración de las Ferias y Fiestas de la Virgen de la Vega, previstas del 7 al 15 de septiembre. “Tenemos claro que con miedo no hay fiestas”, afirmó este miércoles la concejala de Familia e Igualdad de Oportunidades, Ana Suárez, quien presentó junto al titular de Protección Ciudadana, Fernando Carabias, las medidas diseñadas por el Consistorio para evitar las “incalificables” agresiones sexuales y actuar en consecuencia en caso de producirse.

Según explicó Suárez, el regreso de los conciertos a la Plaza Mayor, y las consiguientes aglomeraciones, conllevará la instalación de un punto violeta junto al escenario que estará activo desde media hora antes del inicio del espectáculo y hasta su finalización. El espacio estará atendido por personal técnico del Centro de Información y Asesoramiento a la Mujer (Ciam) y contará con la colaboración de las asociaciones de mujeres de la ciudad. “Personal cualificado que conoce perfectamente este tipo de situaciones y el protocolo de actuación adecuado, lo que permite garantizar que la respuesta sea correcta e inmediata”, valoró la concejala.

Asimismo, los conciertos que tendrán lugar en el parque Elio Antonio de Nebrija, junto a la ribera del Tormes, también estarán dotados de un punto violeta regido por personal análogo. Suárez especificó que su función será la de “informar” sobre todos los recursos que existen en Salamanca para hacer frente a las agresiones sexuales, pero también “sensibilizar, prevenir e intervenir”, puesto que tendrán línea directa con la Policía Local y mantendrán contacto permanente.

Además, el Ayuntamiento distribuirá 10.000 'tapavasos' reutilizables y adaptados a varios tamaños de copa para evitar la contaminación de las bebidas que estén disfrutando las mujeres, principal método para cometer la sumisión química. Estarán disponibles tanto en los locales de ocio nocturno como en las casetas de la Feria de Día. Según avanzó la concejala de Familia e Igualdad de Oportunidades, estos elementos contarán con información en varios idiomas sobre cómo identificar un caso de posible sumisión química y cómo reaccionar si se produce uno.

Por último, el Ayuntamiento de Salamanca intensificará su presencia en redes sociales para sensibilizar sobre el tema y favorecer la prevención. “Sabemos que es el mejor canal de comunicación para llegar a los jóvenes de nuestra ciudad de forma eficaz”, matizó Suárez, quien recordó que ya se han desarrollado con éxito campañas en redes anteriormente. “El vídeo del año pasado funcionó muy bien y conseguimos que fuera viral”, calificó la teniente de alcalde.

Protocolo de seguridad

La comparecencia en el Salón de Recepciones de la Casa Consistorial contó además con la presencia del concejal de Protección Ciudadana, Fernando Carabias, quien avanzó que el dispositivo policial para las fiestas pondrá el énfasis en los puntos donde habrá más aglomeraciones. “La Policía Local se encargará de que se cumplan todas las medidas de seguridad, incluyendo estas y también las ordinarias, con el fin de lograr lo que todos queremos: disfrutar de las fiestas”, manifestó.

Carabias reconoció que el Ayuntamiento ha habilitado un teléfono directo para que el personal que esté en el punto violeta pueda comunicar “los posibles casos de sumisión química o cualquier otra modalidad de agresión sexual” y que los agentes puedan actuar de manera “inmediata”. Detalles que se expondrán durante la junta local de seguridad que tendrá lugar mañana, y cuyas particularidades no quiso avanzar a la espera de las posiciones de otros cuerpos de seguridad que también participarán en el protocolo.

Sobre la moda de los pinchazos, Fernando Carabias quiso restar hierro al asunto, en virtud del exiguo número de casos producidos y alertó sobre lo que pueda hacer “algún gracioso”, en este sentido. “Las noticias que nos llegan de fuentes policiales es que no es tan alarmante como parece. No ha habido tantos casos como para provocar la adopción de medidas policiales. Está todo planificado para que, ante cualquier posible denuncia de un pinchazo, se actúe. Como así ha ocurrido en algunas fiestas, no solo en Salamanca, en las que algún gracioso ha hecho alguna cosita de este tipo como gracia. Realmente, como pinchazo para sumisión química, no ha habido casos”, zanjó.