El expresidente del Gobierno de España José Luis Rodríguez Zapatero mostró este jueves "cierta compasión" por el presidente de la Junta de Castilla y León, Alfonso Fernández Mañueco, en referencia a la posición de su socio de gobierno, Vox, negando la existencia de la violencia de género como concepto. "Cuando oigo al vicepresidente de esta Comunidad, pienso que él es quien lo debe pasar peor", reconoció en alusión al mandatario autonómico del Partido Popular.
Rodríguez Zapatero, quien participó hoy en el acto inaugural de los estudios de género y políticas de igualdad en la Universidad de Salamanca, aseguró que no reconocer la violencia de género como concepto es "situarse fuera del ordenamiento jurídico internacional" y mostró su preocupación por las tesis de Vox en este sentido, como parte del Ejecutivo de Castilla y León durante una intervención ante los medios de comunicación antes del inicio de su ponencia, recoge la Agencia Ical.
Así, la violencia de género, para el exmandatario, es un "concepto de Naciones Unidas", como lo son, según ejemplificó, "la libertad de expresión o el derecho de reunión". "Es un concepto universalmente asumido. Me sorprende y me preocupa que haya una fuerza política que esté en un Gobierno y que niegue el concepto de violencia de género, que es como negar, insisto, el derecho a la igualdad, a manifestarse o a la libertad de prensa. Son conceptos institucionalizados y aprobados por las Naciones Unidas, por todos los países del mundo y, por supuesto, por todo el ordenamiento europeo", zanjó al respecto.
Las universidades en los avances de igualdad, "el 'password' de la democracia"
El expresidente José Luis Rodríguez Zapatero, destacó el papel de las universidades en los avances realizados en el ámbito de la igualdad, que definió como "el 'password' de la democracia". Zapatero asistió hoy en la Usal al acto inaugural de los estudios de género y políticas de igualdad y pronunció una conferencia alusiva en el salón de grados de la Facultad de Derecho, según informa Ical.
Durante un encuentro previo con los medios de comunicación, Rodríguez Zapatero subrayó que las universidades son "decisivas" para el progreso de un país. "Si uno quiere conocer el grado de desarrollo de un país tiene que mirar a las universidades", refirió, destacando que han sido, como instituciones, "muy leales cumplidoras de la ley de igualdad del año 2007" y, en este sentido, "las que mejor han implementado los planes de igualdad".
Asimismo, el expresidente sugirió que "todo lo que pueda generarse desde la universidad en favor de la igualdad, y en concreto de la igualdad de género, será una contribución decisiva a que la democracia cada vez sea más reconocible, apreciable y recupere permanentemente la confianza de la ciudadanía".
Zapatero reiteró que la igualdad es "la contraseña de la democracia, el fundamento", ya que "nace para eso" y es "a lo que aboca su desarrollo". "La igualdad de género ocupa un papel central. Es lo que supone la mayor rectificación de la historia, y las universidades son historia y tienen que saber interpretar, acompañar y liderar ese cambio profundo que estamos aún empezando a llevar adelante en favor de la igualdad de género y de los derechos de las mujeres", resumió.
El exmandatario socialista dio así el pistoletazo de salida al Máster Universitario en Estudios Interdisciplinares de Género, dirigido por Ángela Figueruelo Burrieza, y al Doctorado en Estudios Interdisciplinares de Género y Políticas de Igualdad, coordinado por Marta del Pozo Pérez. El acto contó con la asistencia del rector, Ricardo Rivero, y la vicedecana de Docencia de la Facultad de Derecho, Ángeles Guervós, además de cargos socialistas incluida la subdelegada del Gobierno en Salamanca, Encarnación Pérez.
En concreto, Rodríguez Zapatero impartió la conferencia inaugural titulada, 'Democracia e igualdad de género', con el objetivo de conmemorar el 15 aniversario de la aprobación de la Ley Orgánica 3/2007, de 22 de marzo, para la igualdad efectiva de mujeres y hombres.
Ley de la Memoria Democrática
José Luis Rodríguez Zapatero defendió también la importancia de "reconocer a los olvidados" en lo referido a la legislación de memoria democrática, ahora que está aprobada la nueva ley en este sentido. Zapatero aseguró que el texto, que sigue los pasos del aprobado por él mismo en 2007, es "fundamental" para avanzar hacia "una democracia más perfecta" y sostuvo que si hay voces en contra en el seno de su partido, el PSOE, "serán muy pocas".
El que fuera presidente del Ejecutivo central durante dos legislaturas expuso durante la inauguración de los estudios de género y políticas de igualdad de la Universidad de Salamanca que "la democracia es una promesa abierta y un continuo proceso de conquistas", recordando los avances producidos en distintos campos.
"Cuando comenzó la democracia, en el debate constituyente, la igualdad de género o el papel de las mujeres ocupó un lugar absolutamente secundario. Apenas había diputadas y senadoras. Hubo muchos gobiernos, ya en democracia, que no contaban con la presencia de mujeres. Esto nos parece ahora impensable. Es decir, la democracia es un proceso abierto", recalcó.
Así, Rodríguez Zapatero recordó que él mismo puso en marcha una Ley de la Memoria Democrática cuyo objetivo, en esencia, era "extender derechos". "Derecho a las personas olvidadas ya las personas no reconocidas, porque la clave de la democracia es el reconocimiento a la singularidad de cada una de las personas por su condición de seres humanos", apuntó.
De igual manera, el expresidente se refirió a la ilegalización del régimen franquista en el nuevo texto normativo. "Las consecuencias, a estas alturas, tienen más que ver con un orden moral, seguramente, que jurídico. Sobre esto ya hubo un debate muy intenso, pero tiene su valor simbólico", reconoció, recordando que la ley anterior ya consideraba ilegales "todos los actos" y establecía un procedimiento para "el reconocimiento del daño causado" y que "habían sido víctimas de condenas injustas", según informa Ical.
"Lo más importante, en mi opinión, de esta ley es, lo primero, reconocer a los olvidados, porque, lo vuelvo a repetir, claro que en la Guerra Civil sufrieron los dos bandos, por supuesto, pero la gran diferencia histórica que la democracia debía de restituir es que uno, los que perdieron la Guerra, fueron olvidados y no reconocidos. Y sin embargo, los otros sí. Y yo no tengo nada contra ellos, pero hay que reconocer a esas miles de familias que han estado durante décadas sin saber dónde estaban sus seres queridos", resumió.
En último término, el expresidente del Gobierno aseguró que la democracia es "reconocimiento a todos" y por tanto, sostuvo que esta ley es “fundamental” porque hace "una democracia más auténtica". "Seamos claros, si hay las familias que sean olvidadas y no reconocidas, esa democracia tiene algunas zonas de no sinceridad", concluyó.