Un hombre es perseguido por la Policía Nacional, en el barrio Huerta Otea, y al verse casi pillado se lanza al río Tormes por la nueva pasarela que une el barrio con los huertos urbanos para, posteriormente, ser detenido.
Sobre el detenido pesaba una orden de busca y captura. Además, según fuentes policiales, el prófugo intentó esconder un bolso que portaba, y, a continuación abandonó el río, ello a pesar de la fría temperatura del agua y el ambiente.
A referir, que en el rastreo del río también intervinieron agentes de la Policía Local de Salamanca, así como efectivos del Parque Municipal de Bomberos, según vecinos que observaron los hechos.
Una vez detenido, este hombre fue llevado por la Policía Nacional hasta sus dependencias para, posteriormente, ser puesto a disposición judicial por la orden que existe contra él.