La polémica por la posible supresión del Servicio Regional de Relaciones Laborales (Serla) en Castilla y León se ha convertido en tema nacional. Todos han opinado. Sindicatos, Junta, patronal, Consejo Económico y Social y hasta el Ministerio de Trabajo. Sin embargo, el director general del Serla, Julio Cordero, todavía no se había pronunciado. Hoy lo ha hecho en el foro ‘La solución autónoma de conflictos laborales’. Una jornada organizada por El Español-Noticias de Castilla y León, en colaboración con el Consejo Económico Social, y que ha servido para conocer la opinión de su director.
Cordero lo ha dejado claro: “Sin aportación de la Junta, no se puede dar el servicio”. En alusión a la intención de la Consejería de Empleo, Industria y Comercio de dejar de financiar este sistema de mediación y arbitraje laboral ya que es “deficitario”, como indicó el consejero Mariano Veganzones (Vox) hace unas semanas. El director general del Serla ha realizado una defensa a ultranza de esta mediación a la que ha calificado del “caso de éxito más relevante de la democracia participativa”. Hay que recordar que la Junta ha afirmado que se seguirá garantizando la "mediación y arbitraje" en los conflictos laborales de Castilla y León, aunque sigue sin definir cómo y de dónde saldrá la financiación.
Por este motivo en la Facultad de Ciencias Sociales de Salamanca ha abogado porque se “debe garantizar una financiación” desde la Junta de Castilla y León. ¿Cómo? Pues ha apostado por varias fórmulas que están encima de la mesa. Por ejemplo, destinar una “simple partida presupuestaria” o que sea asumido por otra Consejería, como ya avanzó el CES en su informe. “Algo que sea común a todos en todos los sentidos”, ya que ha insistido “es imposible sin financiación”.
Cordero ha recordado que se incorporó como director general en diciembre de 2020, cuando se contaba con los mismos trabajadores que en 2000 y cuando solo se tenía competencias en conflictos colectivos, unos 300 al año. Ahora cuentan con ocho empleados, dos más, aunque haría falta uno más, y reconoce que no se puede “atender a todos los ciudadanos que llegan”. Sus competencias han aumentado un 20%, pero siguen con menos medios. “No podemos atender a todos porque nos faltan recursos humanos y económicos. Así no salen cuentas”, ha zanjado.
"Una polémica sin sentido"
En su opinión, la polémica que ha surgido en la Comunidad “carece de sentido” ya que es el mejor sistema para resolver conflictos laborales y lo hace de una “manera barata y eficiente”. Una de las soluciones propuestas desde la Consejería es que sean los propios funcionarios los que regulen estos conflictos, algo que para Cordero no es viable. “No es posible que lo hagan los funcionarios mejor, es un aspecto no comparable con la administración”, ha asegurado, para insistir en que “si están bien financiados realizan un buen trabajo, una gran labor, pero es diferente” a lo que realiza en estos momentos el Serla, un órgano extrajudicial, autónomo y paritario, formada a partes iguales por los agentes económicos y sociales más representativos de la Comunidad. Tiene como objetivo la solución extrajudicial de los conflictos laborales entre empresarios y trabajadores de Castilla y León, mediante la mediación, el arbitraje y la conciliación.
El “interés social” del Serla también ha sido destacado por su director, para quien su “utilización” ha supuesto su “consolidación, consecuencia directa de que ha sido plenamente asumido por los actores directos de las relaciones laborales, adquiriendo un papel cada vez más relevante y dinamizador del entorno laboral de Castilla y León”. Así, ha otorgado “un papel crucial” en esta Fundación a la que atribuye medidas que han supuesto que los poderes públicos “van a gobernar menos y a gestionar menos los conflictos”.
Por último, Cordero se ha marcado cinco retos de futuro para el Serla. Lograr avances de digitalización para la medicación, formación previa para los trabajadores, y mejorar la relación y cooperar más con operadores jurídicos, administraciones públicas y órganos judiciales. De esta manera, concluía una intervención del presidente del Serla donde se ha mandado un claro mensaje de apoyo a la continuidad y a la financiación de este sistema de mediación en conflictos laborales.