Un susto se llevaron los alumnos y profesores del Instituto Torres Villarroel de Salamanca, ubicado en el barrio de San José. Así, según ha podido saber este diario, sobre las 11.39 horas de este miércoles, se recibió una llamada de teléfono que alertaba de la colocación de un artefacto explosivo.
Desde ese momento, se puso en marcha el protocolo de emergencias previsto para estos casos. Este periódico pudo confirmar que no había consistido más que en una falsa alarma.
No obstante, al activarse el protocolo, hasta el barrio San José acudieron varias dotaciones de la Policía Nacional, así como agentes de la Policía Local, para controlar el gran tráfico de vehículos y personas que se mueven por esa importante vía. Todo ello, hasta comprobar que todo había sido una broma de mal gusto.