San Martín de Tours de Salamanca recupera su esplendor dentro del plan Románico Atlántico gracias a más de medio millón de inversión
El consejero de Cultura, Turismo y Deporte destaca el resultado “verdaderamente maravilloso” de la actuación impulsada también por la Fundación Iberdrola, cuyo presidente elogia “dignificar la situación de verdaderas joyas arquitectónicas”
15 noviembre, 2023 13:50Noticias relacionadas
El consejero de Cultura, Turismo y Deporte, Gonzalo Santonja, y el presidente de la Fundación Iberdrola, Fernando García Sánchez, visitan la iglesia de San Martín de Tours para inaugurar y comprobar in situ el resultado de la última actuación realizada en el edificio, dentro del plan Románico Atlántico, promovido por ambas entidades.
En esta visita, Gonzalo Santonja destaca el resultado "verdaderamente maravilloso" de la actuación, de la que García Sánchez elogia "dignificar la situación de verdaderas joyas arquitectónicas". Todo ello, gracias a una inversión de más de 500.000 euros, ecaudados en el marco del plan Románico Atlántico, impulsado por la Junta de Castilla y León, la Fundación Iberdrola y la Fundación Santa María la Real.
Esta iglesia, situada en plena plaza del Corrillo a escasos metros de la Plaza Mayor, “tenía muchos problemas estructurales y se ha llevado a cabo un trabajo admirable”, en palabras del consejero. Gonzalo Santonja destacó la continuidad del proyecto de restauración, tras haber sido ideado por el Partido Popular, recogido por Ciudadanos y, ahora, retomado por Vox en el mismo punto. “Ese es nuestro espíritu. Hay cosas que se tienen que descartar, pero otras se tienen que mantener”, comentó.
Por su parte, el presidente de la Fundación Iberdrola recordó que la actuación forma parte del plan Románico Atlántico, “una iniciativa que empezó hace ya 13 años y que sigue avanzando en dignificar la situación de verdaderas joyas arquitectónicas, verdaderos tesoros culturales”. Fernando García añadió que la intención de la fundación que preside es “apoyar el arte y que sea para todos”.
Este programa tiene varios vectores de actuación, según aclaró, incluyendo la restauración propiamente dicha, la difusión y el desarrollo económico de los territorios. “es importante actuar en los edificios, pero también formar y que cada uno de nosotros conozca sus raíces, que se haga responsable de lo que ha sido y esto ayuda mucho desde el punto de vista de la psicología social y del futuro hacia el que queremos ir. Una tercera parte importante es la dinamización social y económica de las zonas donde están estas joyas. La cultura tiene una gran importancia como tractor de la economía”, resumió García.
Durante su recorrido estuvieron acompañados, entre otros, por el presidente de la Fundación Santa María la Real, Ignacio Fernández Sobrino, y el director de la Fundación Iberdrola España, Ramón Castresana. En este caso, la intervención se centró en la restauración e iluminación del interior del templo, que permite acomodarlo a los requerimientos de un espacio situado en pleno corazón de una ciudad histórica, que compagina su uso litúrgico con el interés artístico e histórico que despierta entre los muchos visitantes que pasan cada día frente a sus puertas. Los trabajos han consistido en la recuperación de morteros y acabados originales.
Diferentes fases de intervención
En la visita al templo, los responsables de la actuación recordaron, además, que el proceso de intervención se ha prolongado durante varios años. En sucesivas fases, se logró, por un lado, subsanar los problemas estructurales del edificio, y por otro, habilitar un recorrido expositivo para, finalmente, acondicionar el interior del templo. Las deformaciones existentes en pilares, arcos y bóvedas de las tres naves del edificio, fruto de la propia construcción y de diferentes modificaciones a lo largo de su historia, justificaron un estudio completo de su secuencia constructiva, que incluyó un análisis de la evolución de su arquitectura, abordado por varios equipos multidisciplinares.
Además, se elaboró un levantamiento de precisión que resultó clave para la comprensión del comportamiento estructural del templo y que confirmó que las cargas que soportaban los muros románicos del edificio estaban descompensadas y era necesario realizar una redistribución para mejorar el margen de seguridad estructural. La actuación se centró en la cubierta del templo, modificando sus puntos de apoyo para distribuir mejor su peso sobre los muros románicos.
Esta actuación se sumó a otras intervenciones de urgencia, como las realizadas en el primer tramo de la nave del Evangelio, sobre la llamada Puerta del Obispo, que concentraba la mayor parte de los daños. Del mismo modo, se recuperó el acceso por la puerta norte del templo y se acondicionó un punto informativo y de recepción de visitantes. Paralelamente, se mejoró el acceso a la Capilla del Carmen, donde se conserva una rica portada románica con policromía original y se le dotó de una iluminación más acorde con el conjunto y más eficiente.
Monitorización
Junto a la intervención propiamente dicha, para conocer el estado real del edificio, se incorporó el templo al Sistema de Monitorización, desarrollado por la Fundación Santa María la Real y se instalaron sensores de temperatura y humedad en puntos muy concretos del edificio. En paralelo, se monitorizaron los movimientos estructurales, tanto estáticos como dinámicos, mediante la instalación de un acelerómetro y clinómetros en los muros norte y sur. El análisis conjunto de todas estas variables permitió entender la evolución del proceso de degradación, esbozar sus causas y, más importante aún, plantear la solución más acertada para cada patología.
El Plan Románico Atlántico es una iniciativa de cooperación transfronteriza para la conservación del patrimonio cultural, que incluye proyectos de restauración y puesta en valor de una veintena de templos románicos ubicados en las provincias españolas de Zamora y Salamanca y en las regiones portuguesas de Porto, Vila-Real y Bragança. Un ejemplo de cooperación institucional y de participación público - privada, ya que está promovido por la Junta de Castilla y León, la Fundación Iberdrola España y el Ministerio de Cultura de Portugal.
En la provincia de Salamanca, el Plan ha llevado a cabo diferentes actuaciones, no solo en la iglesia de San Martín de Tours, sino también en la catedral de Ciudad Rodrigo o en las localidades de Forfoleda, Yecla de Yeltes, Hinojosa de Duero, Cerralbo, San Felices de los Gallegos o Carrascal de Velambélez. Para todas y cada una de las actuaciones se cuenta con el apoyo técnico de la Fundación Santa María la Real, así como la colaboración de las diócesis de cada territorio, en este caso, la de Salamanca.