Juan Manuel Corchado Rodríguez es el candidato único a la Rectoría de la Universidad de Salamanca. Doctor en Ciencias de la Computación (Universidad de Salamanca) e Inteligencia Artificial (Universidad West of Scotland), es catedrático del Área de Ciencias de la Computación e Inteligencia Artificial, Departamento de Informática y Automática de la Universidad de Salamanca. Y es Premio María de Maeztu a la excelencia científica.

Posee una gran experiencia en gestión. Ha ocupado los cargos de vicerrector de Investigación y Transferencia desde el 2013 hasta el 2017, director de la Escuela de Doctorado y director del Parque Científico de la Universidad de Salamanca. De igual modo, también fue elegido dos veces decano de la Facultad de Ciencias (2008-2013).

Actualmente es director del Grupo de Investigación Reconocido BISITE (Bioinformática, Sistemas Inteligentes y Tecnología Educativa), miembro del patronato del AIR Institute, director del IOT Digital Innovation Hub e Investigador Principal del Proyecto que financia el DIGIS3 (Digital Innovation Hub de Castilla y León).

En una entrevista con EL ESPAÑOL Noticias de Castilla y León, el candidato y próximo rector, tras unas elecciones que se celebrarán el 7 de mayo, marca la línea de actuación de su equipo para los próximos seis años y, de paso, busca "aglutinar" a toda la comunidad universitaria en un "proyecto ilusionante para el devenir futuro de la USAL".

El candidato único a rector de la Universidad de Salamanca, Juan Manuel Corchado Falcao

- Todo indica que, al final, Juan Manuel Corchado será el rector de la Universidad de Salamanca.

- Eso parece. La verdad es que tengo mucha ilusión. Estamos ahora mismo en un proceso electoral, y nuestra misión es seguir ilusionando a todos nuestros compañeros, a todos nuestros estudiantes y a las ciudades en las que la Universidad de Salamanca tiene presencia. Creo que, junto con el equipo, que me da la sensación de que ha gustado a todo el personal de la Universidad, estamos transmitiendo qué es lo que vamos a hacer, visitando todos los centros y con mucha acogida. Todo el mundo está muy ocupado en la Universidad, tienen mucho trabajo y muchas clases, pero estamos viendo mucha afluencia de compañeros y de estudiantes, tanto de PDI como PTGAS y muy contentos.

- Dada la circunstancia de que no existen más candidatos, ¿no teme por la abstención?

- No. Realmente es algo que no me importa, ni la abstención ni el voto en blanco. Lo que quiero ver es que tengamos realmente el apoyo de la Universidad, y creo que lo vamos a tener. Y te digo una cosa, estoy convencido de que aquellos que, incluso no me vayan a apoyar ahora, cuando vean lo que vamos a hacer y que contaremos con ellos, nos acabarán apoyando.

- ¿En qué situación se encuentra la USAL?

- La Universidad de Salamanca tiene un historial tan potente y una trayectoria tan destacable, que siempre está en una buena situación. También se pueden mejorar cosas, y en eso estamos. Ha crecido mucho estos últimos años, y ahora queremos seguir creciendo con más orden. Esto implica más personal, con mejores sueldos, incorporar a más gente joven, facilitar la promoción y motivar a la gente con esos proyectos que necesita, para que puedan desarrollar sus actividades. También vamos a impulsar mucho la docencia, lo que implica que motivemos a los equipos de gobierno de los centros y a los compañeros, para que ellos se vean capaces de impulsar esta renovación de grados, el desarrollo de másteres y posgrados, y el impulso que le queremos dar a nuestra gran Escuela de Doctorado, que es, con diferencia, la más grande de Castilla y León. Además, tenemos grandes efemérides que van a llegar pronto, como es todo lo relacionado con la Escuela de Salamanca en su quinto centenario, al que tenemos que sacar mucho provecho para hacer cosas destacables con gran potencial.

- Durante el proceso electoral remarca usted dos líneas principales de actuación: la primera, disminuir la burocracia, ¿es tanta y en qué incide?

- La burocracia está en nuestras vidas en todos los aspectos, básicamente, y eso hace que la carga administrativa, y los procesos que tengamos algunas veces, sean un poquito manuales o farragosos. Lo que pretendemos es identificar dónde tenemos esos cuellos de botella, y que vamos a sobrepasar, no me cabe duda. Para ello, vamos a crear una unidad específica para reestructurar e impulsar nuestro CPD. Como también vamos a crear otra unidad que vaya trabajando con los servicios, con los centros, en aquellos procesos que son susceptibles de una digitalización mejorada para que esa carga burocrática se reduzca. Y en paralelo, queremos aumentar la plantilla del personal de gestión para que se encargue de realizar los procesos de administración y liberemos al personal de investigación y docencia de esta carga burocrática.

- La otra línea es la financiación. ¿Será la LOSU una de las soluciones, dando por supuesto que la Junta de Castilla y León contribuya?

- Esperemos que la LOSU nos traiga soluciones. De hecho, se ha prometido un dinero para impulsar el crecimiento de las plantillas que necesitamos, que nos permitirá seguir en este proceso de rejuvenecimiento del personal y, también, de estabilización de los compañeros. Y en paralelo, también contamos con la Junta de Castilla y León para que nos permita subir el capítulo uno, que es con el que se paga como Universidad al personal, para poder mejorar. Estos sueldos son para poder facilitar la especialización de nuestros compañeros y la mejora en el puesto de trabajo.

- ¿Qué busca con su equipo, mitad renovación, mitad continuidad?

- Estamos a un poco más de la mitad de curso y hay que tener mucho cuidado en los cambios. Estoy convencido de que el traspaso será muy sencillo y que nadie se va a sentir perjudicado por ello. Pero queríamos darle un aire distinto y nuevo con algunos vicerrectorados, impulsando algunas áreas con personas distintas y otras, que no solo van por buen camino, sino que los compañeros que están en ellas se han comprometido con nosotros en el desarrollo de nuestro plan, y van a impulsar este cambio, aunque sean las mismas personas.

- Salamanca, ciudad del español, y su Universidad centro internacional. ¿Seguirá incidiendo en esa línea de apoyo al estudio del español en la ciudad de Salamanca?

- Para nosotros, no solo es prioritario, sino que es algo fundamental y, de alguna forma, está en nuestra alma, en nuestro corazón, todo lo que es el español. También en paralelo, vamos a utilizar nuestra potencia dentro del español para impulsar un centro de estudios de otras lenguas. En ese aspecto, vamos a impulsar el Centro Internacional del Español. Vamos a potenciar el desarrollo de proyectos y de la actividad que tenga el centro. Creo que se van a ver cambios relativamente pronto.

Equipo de Juan Manuel Corchado

- ¿Se podrá convertir la USAL también en una Universidad de referencia en cuanto a estudios tecnológicos, porque en investigación está en lo más alto, sobre todo médica y científica?

- Efectivamente, la Universidad de Salamanca, en las áreas donde siempre ha sido fuerte es en lo bio sanitario. En todo lo que son ciencias sociales, lo que lee y todo lo que es el español, como ya hemos dicho, y los idiomas en educación, es una gran potencia como universidad desde siempre. Quizás, porque han llegado en último lugar y, a veces, porque las ingenierías están en campus fuera de Salamanca, es lo más desconocido. Pero en ciencias puras, física, matemáticas o química, somos también extraordinarios. Y en lo que se refiere a las ingenierías, cada vez tenemos mayor reconocimiento. La verdad es que en todas tenemos estudiantes que salen muy bien preparados y, además, me consta que la formación es muy personalizada, porque también son grupos pequeños. Todos, sin excepción, salen colocados y son profesionales muy bien valorados. Por ejemplo, las que tenemos en Salamanca, algunas funcionan muy bien. En este ámbito de las ingenierías hemos conseguido la Cátedra de IA y Reto Demográfico, que es muy importante para nuestra comunidad y para nuestro ámbito de influencia como Universidad. Y también la Cátedra de Ciberseguridad, porque tampoco hay tantas cátedras de esta característica, de la que cada vez tenemos más reconocimiento. Y por dar otro dato, lo estamos haciendo tan bien en este campo, que Salamanca destaca entre las ciudades del noroeste de España, y no lo digo yo, lo dice la Fundación COTEC, por el empleo tecnológico que se está generando en los últimos lustros.

- ¿Puede ser la nueva Facultad de Agrarias y Medioambientales un punto de inflexión para estos nuevos retos de investigación e innovación?

- Por supuesto. Ese nuevo campus, en colaboración con las infraestructuras que va a crear la Diputación de Salamanca y el CSIC-Irnasa, va a ser un polo de producción científica, de atracción de talento y, también, de desarrollo económico para Salamanca y para toda su provincia, y extensible a todo el distrito Universitario de Salamanca y a Castilla y León. Tenemos que potenciar y mantener el mejor estado. Es lo que vamos a hacer en ese campus y, con esas infraestructuras, desde luego, y con los laboratorios que se desarrollen, la Universidad de Salamanca tiene que liderar el desarrollo tecnológico en Castilla y León.

- ¿Qué mensaje desea transmitir a la comunidad universitaria?

- Que es un gran momento para Salamanca. Quiero que todos se ilusionen con este proyecto y que, entre todos sin excepción, los estudiantes y el profesorado le den un impulso. Vamos a estar ahí para intentar generar los recursos que se necesitan y darle una estructura a todo esto, que vamos a hacer conjuntamente, para facilitarle la vida a nuestros compañeros y mejorar la educación, la docencia y la formación de nuestros estudiantes.

- Finalmente, tras los seis años de su mandato, ¿con qué desearía verse recordado?

- Son seis años y no hay segundo mandato. Es una de las cosas que nos trae la LOSU. Simplemente nos gustaría ser recordados porque hemos cumplido con el programa que presentamos. Es un programa muy intenso. Lo queríamos llevar así porque creemos que es lo que hay que hacer, y también para ganar las elecciones en caso de que hubiera otros competidores. Queríamos ofrecerlo y no le hemos cambiado ni una coma ni lo vamos a cambiar hasta el final. Incluso vamos a intentar mejorarlo. Y lo que a mí me encantaría es que se nos recuerde, no solo a mí, porque yo solo soy uno, a todo el equipo, como que al final hemos alcanzado los objetivos que nos habíamos marcado, y la Universidad de Salamanca ha dado un pasito hacia adelante en la dirección correcta que todos queremos.

 

Noticias relacionadas