Tras varios meses de investigación, la explotación operativa se ha llevado a cabo en distintas fases, culminando con la desarticulación de una organización criminal asentada en Salamanca y encargada de la distribución de cocaína a otros grupos. Esta organización criminal tenía diferentes puntos de venta al menudeo de sustancias estupefacientes, así como varios negocios legales de hostelería como pubs, clubs y otros establecimientos comerciales ubicados en la zona centro y en el barrio de Garrido de esta ciudad. También disponía de negocios relacionados con el reparto de comida a domicilio, los cuales podrían estar siendo utilizados para blanquear el dinero proveniente del tráfico de drogas.
El máximo responsable de la organización era la persona que disponía de medios económicos suficientes para financiar la compra y venta de estupefacientes, siendo esta persona el propietario de la mercancía que se comercializaba en niveles y escalones inferiores.
En el segundo nivel de la organización existía otro responsable que se encargaba de tratar con los “clientes importantes” de la organización a los que surtía directamente y se encargaba también de “una franquicia” que la organización tenía en la localidad de Guijuelo, regentando un punto de venta en dicha localidad y abasteciendo a los clientes de esa zona, además de surtir de sustancia estupefaciente a los pisos de citas.
En un tercer nivel estaban otros dos individuos que eran los encargados de la venta al menudeo de las sustancias estupefacientes en los establecimientos que disponía la organización.
Explotación operativa
En una primera fase se llevaron a cabo varios registros domiciliarios y en establecimientos comerciales en esta ciudad, así como en las localidades de Guijuelo y El Encinar (Terradillos).
Posteriormente se llevaron a cabo otras dos fases de la operación contra la organización criminal investigada, la cual tenía íntima relación con otro ciudadano asentado en la localidad madrileña de Móstoles y que a su vez abastecía un punto de venta de drogas en la localidad salmantina de Santa Marta de Tormes. En estas dos fases se llevaron a cabo varios registros en Madrid, Móstoles y en la localidad de Santa Marta de Tormes, procediéndose a la detención de dos individuos que regentaban un activo punto de venta de sustancias estupefacientes ubicado en esta localidad.
Como resultado final de la operación fueron detenidas siete personas de distintas nacionalidades, española, dominicana, peruana; y se realizaron ocho entradas y registros en Salamanca, Madrid, Móstoles, Santa Marta de Tormes, Guijuelo y El Encinar (Terradillos). Se intervinieron 240 gramos de cocaína, 79,2 gramos de hachís, 43 pastillas de viagra, una pistola táser, una pistola simulada, una prensa hidráulica con varios moldes, varios teléfonos móviles, 18.875 euros en efectivo y tres vehículos de alta gama, uno de ellos “caleteado”, es decir, preparado para ocultar sustancias estupefacientes.
Como resultado de la operación se llevó a cabo la desarticulación de siete puntos de venta al menudeo de sustancias estupefacientes.
De todos los hechos y detenciones se dio oportuna cuenta al Juzgado de esta ciudad que entiende de los hechos.