La Policía Nacional de Salamanca, en colaboración con agentes de la Policía Local, han detenido a un hombre de 58 años como presunto autor de dos intentos de robo con intimidación en dos establecimientos de la ciudad en los que, al parecer, llegó a amenazar a empleadas con un cuchillo.
Según informan fuentes policiales, los hechos ocurrieron el pasado 3 de julio sobre las 17:15 horas, cuando varios agentes fueron comisionados a un establecimiento de la calle Alfonso VI en el que, al parecer, había entrado un hombre exhibiendo un cuchillo y solicitando en tono amenazante a una trabajadora, la misma que alertó de lo ocurrido, que abriera la caja y le entregase todo el dinero.
Ante esto, la empleada aseguró que ella se apartó de la caja, a la vez que le decía al ladrón que había cámaras de seguridad, sin llegar a cumplir con su petición, por lo que este terminó abandonando el comercio, sin conseguir sus pretensiones.
Así, una vez que los policías llegaron al lugar de los hechos, estos se entrevistaron con la víctima. Un momento en el que esta aportó las características físicas de autor de los hechos, indicando, además, que portaba mascarilla y gafas de sol.
Entonces, los agentes realizaron varias batidas por las inmediaciones, hasta que, de repente, una de las dotaciones que se encontraba por la calle Torres Villarroel fue requerida por la empleada de uno de los establecimientos ubicados en dicha calle.
En ese momento, la trabajadora manifestó que hacía unos instantes, un hombre había entrado en el local y, sin llegar a mostrar ningún objeto, pero sí señalándose la cadera donde portaba el cuchillo, le exigió en tono amenazante que le diese el dinero de la caja registradora.
Después de que la empleada se retirase de la misma, el autor de los hechos empezó a manipular la caja con la finalidad de abrirla, aunque sin éxito, por lo que terminó abandonando el lugar.
Y es que, dado que esta segunda víctima ofreció las mismas características físicas que la anterior del ladrón, los agentes intensificaron su búsqueda hasta encontrarle en la calle Picornell, donde fue interceptado, identificado y detenido, tras requisarle el arma blanca que portaba.
Acto seguido, fue trasladado a dependencias policiales, donde una vez practicadas las gestiones documentales pertinentes, fue puesto a disposición del Juzgado de Instrucción en funciones de guarda de Salamanca, decretando este su ingreso en prisión, dado que le constan varios antecedentes por hechos similares.