La dimisión del procurador socialista en las Cortes de Castilla y León Juan Luis Cepa ha producido un terremoto en la vida política de Castilla y León, y en el PSOECyL en particular, por su imputación en un caso de agresión sexual a un menor, al que habría captado a través del portal de citas Grindr. Llueve sobre mojado, pues hace apenas medio año otro procurador, por Soria, y número 3 del grupo parlamentario socialista, Ángel Hernández, tuvo que hacer lo propio tras ser detenido por violencia de género hacia su pareja.

Un día después del escándalo, el PSOECyL ha salido a dar explicaciones en la persona de la secretaria de Organización y vicepresidenta de las Cortes, Ana Sánchez, quien ha asegurado que no supo nada del proceso judicial contra su portavoz de Agricultura y Ganadería y ha enviado su apoyo a la supuesta víctima. Aún así, el grupo parlamentario de Tudanca sale malherido de este revés, pues queda desarmado en el debate parlamentario para el resto de la legislatura.

En la comparecencia, Sánchez ha confirmado lo lógico: que será María del Carmen García Romero, la siguiente en la lista electoral, quien ocupará el escaño vacío que deja Cepa. Pero ¿quién es la nueva procuradora?

Ya fue procuradora en las Cortes

Carmen ‘Doñinos’, apelativo refleja su profundo vínculo con la localidad, de la que ha sido alcaldesa durante tres legislaturas, no es nueva en el hemiciclo. Ocupó un escaño en la bancada socialista en 2019, cuando el PSOE ganó las elecciones aunque no pudo gobernar en la Junta, hasta el año 2021, cuando Alfonso Fernández Mañueco rompió la baraja con Ciudadanos y convocó elecciones anticipadas.

Hasta entonces, Carmen García Romero ya venía respaldada por una larga trayectoria en la política municipal y provincial. En el plano orgánico del PSOE de Salamanca ha sido la secretaria de la agrupación local de Doñinos, e incluso se enfrentó a las primaria con David Serrada para optar a la Secretaría Provincial del PSOE, donde salió derrotada.

Alcaldesa y diputada provincial durante varias legislaturas

Nacida el 24 de octubre de 1971 y diplomada en Relaciones Laborales, García Romero ha dedicado gran parte de su vida a la vida pública. Inició su carrera política como alcaldesa de Doñinos en 2003, cargo que ocupó hasta 2015. Durante estos 12 años, consiguió el respaldo repetido de los vecinos, lo que le permitió consolidar su liderazgo en el municipio.

Simultáneamente a su labor en Doñinos, fue elegida diputada en la Diputación Provincial de Salamanca en 2003, manteniendo este cargo hasta 2019, donde fue además portavoz del grupo provincial socialista.

Doñinos de Salamanca es uno de los municipios importantes del Campo Charro. Tiene más de 2.000 habitantes, y está situado a solo siete kilómetros de la capital del Tormes, lo que le otorga una ubicación privilegiada dentro de la comarca. Pertenece al partido judicial de Salamanca y su término incluye las localidades de Argentina, Doñinos de Salamanca, El Pegollo, San Julián de la Valmuza, y Santibáñez del Río.

Las elecciones de 2015 marcaron un antes y un después en su carrera política. Fue este año cuando la irrupción de Ciudadanos acabó con la hegemonía socialista en el municipio. Aunque el PSOE ganó aquellas municipales y obtuvo 4 concejales, los dos concejales del PP apoyaron a Ciudadanos, que había obtenido 3, y entregó la Alcaldía a Manuel Hernández, ‘Lolo’, el último mohicano de la formación naranja en la provincia de Salamanca.

El liderazgo de Lolo se consolidó, tanto que en 2019 obtuvo mayoría absoluta, dejando a Carmen ‘Doñinos’ sin posibilidades de optar de nuevo a la Alcaldía. Cs obtuvo cinco concejales, tres el PP, 2 el PSOE y 1 Vox, precisamente el que es hoy el diputado provincial de la formación de Abascal en la Diputación de Salamanca.

De forma pareja a la evolución de Ciudadanos en la política nacional, el alcalde de Cs fue perdiendo apoyos entre los concejales de sus propias filas, una situación de debilidad que fue erosionando su mandato hasta que en marzo de este mismo año 2024 presentó su dimisión “por razones personales y de trabajo”. Se negó a negociar la Alcaldía con las dos concejalas socialistas porque “nos llamaron ladrones” y aseguró que se habían unido a los concejales del PP y Vox para obtener su cabeza.

Como así fue. El 13 de marzo de 2024, el popular Agustín Rodríguez se convirtió en nuevo alcalde de Doñinos, con solo tres concejales. Y solo tres fueron los votos a favor de su investidura. El resto, 6 votos en blanco. Las dos abstenciones de las concejalas del PSOE, María Aroa Izquierdo y Eider Arriaga, facilitaron la entrega del bastón de mando al Partido Popular, sin oposición alguna.