Juan Manuel Corchado, rector de la Universidad de Salamanca ha dado un comunicado de urgencia este jueves 26 de septiembre en las Escuelas Mayores de la ciudad charra en el que ha señalado que hay “intereses de naturaleza política” y “venganzas personales” la “persecución sin precedentes” a la que se ve sometido.

Concretamente, ha resaltado que se “siento víctima” dadas las informaciones que publicadas que “no solo distorsionan la verdad, sino que se utilizan con fines espurios, impulsados por diversos intereses de naturaleza política, venganzas personales y ambiciones desmedidas”.

A lo que ha calificado como una campaña de desprestigio se le suma “una táctica de presión en medios y redes sociales hacia editoriales, asociaciones científicas y profesores, con el único objetivo de subvertir el resultado democrático que legítimamente obtuve en las urnas”.

Esto se debe, principalmente a unas recientes publicaciones por parte del Comité Español de Ética (CEEI), al que ha acusado de hacer uso de datos sesgados.  

Además, ha querido denunciar varios delitos que, según ha considera, dañan a su honor e imagen, también una suplantación de identidad y ha recibido amenazas.

“No puedo quedarme en silencio ante esta nueva muestra de clara arbitrariedad. Por ello, he optado por rebatir de manera firme y clara, todos y cada uno de los ataques que se han lanzado en mi contra”, ha señalado.

El informe que ha indicado está escrito por dos investigadores de la Universidad de Granada donde Corchado ha destacado que el CEEI “es un órgano meramente consultivo sin competencias inspectoras, pero algunas de sus actuaciones podrían haber vulnerado algunos códigos”.

También, ha añadido que “no han tenido bastante con tratar de desprestigiarme en mi Universidad, en mi país, que han recurrido a medios internacionales para tratar de echar por tierra el trabajo de años y años de carrera. No se puede olvidar que antes incluso de ser vicerrector entre 2013 y 2017 yo ya era catedrático y contaba con una larga y exitosa trayectoria”.

Lo único que pretende con este comunicado es “defenderme” y ante las dudas de si el rector dimitirá ha sido el mismo el que ha dicho un rotundo no.

Finalmente, ha concluido diciendo que “quiero dejar claro que ninguna de las actuaciones que se me atribuyen pueden considerarse delictivas. Con esta comparecencia y con el informe que  próximamente les enviaremos, rebatiendo el contenido del informe realizado por los dos  profesores de la Universidad de Granada, doy  por cerrado este tema”.