Desde la creación del Instituto de la Cultura Tradicional Segoviana Manuel González Herrero, la Diputación viene mostrando su interés y preocupación por que el folklore segoviano se conserve en buen estado y en plena actualidad en todos sus ámbitos, motivo por el cual esta semana el presidente de la institución provincial, Miguel Ángel de Vicente, rubricaba el compromiso de ésta con entidades como la Escuela de Dulzaina de Segovia, creada por la propia Diputación en 1982, y el ayuntamiento de San Pedro de Gaíllos, responsable del Museo del Paloteo Centro de Interpretación del Folklore.
Acompañado de José María Bravo, vicepresidente de la institución provincial y titular del Área de Cultura, Juventud y Deportes, Miguel Ángel de Vicente recibía en el Palacio Provincial a Miguel Ángel Nogales, presidente de la Escuela de Dulzaina, y a Juan Carlos Montero, alcalde del municipio de San Pedro de Gaíllos, junto a quienes firmaba sendos convenios por importe de 5.500 euros y 4.500 euros respectivamente. Este apoyo económico que ambas entidades reciben sirve, desde hace años, para permitir el desarrollo de algunas actividades que contribuyen a difundir y fomentar el conocimiento del patrimonio cultural musical de la provincia, y que se materializan en recitales, formación, talleres, exposiciones, certámenes, festivales o muestras folklóricas.
No en vano, gracias a la actividad, tanto de la Escuela de Dulzaina como del Centro de Interpretación del Folklore, son muchos los jóvenes segovianos a lo largo del territorio que se animan a conocer de cerca la tradición musical de la provincia, a participar como dulzaineros, tamborileros o danzantes en festejos y romerías propios de los pueblos, a asistir a las clases que oferta la Escuela cada nuevo curso o a inscribir a sus hijos en talleres como el último propuesto desde el Museo del Paloteo, en el que, bajo el título 'Animales, paisaje y paisanaje', los niños descubren qué relación tienen distintos objetos tradicionales con algunos animales domésticos.
“Apoyando la labor que realizan estas entidades, lo que hacemos es arraigar los lazos y las señas de identidad de nuestra cultura entre las distintas generaciones que habitan nuestra provincia”, señalaba al término de la firma de ambos convenios Miguel Ángel de Vicente, para quien “la actividad de la Escuela y del Centro de Interpretación va más allá de la difusión de los conocimientos musicales; comparte la tradición de una forma didáctica, entretenida y amena, en la que los jóvenes la reciben como algo del presente que merece la pena conservar y cuidar con orgullo y respeto para las generaciones del futuro”.