A las 10:45 horas del día 27 de junio de 2022, en el Centro de Exámenes de que dispone la D.G.T. en Segovia, durante la realización de uno de los exámenes teóricos para la obtención del permiso de conducir de la categoría B, se observó por parte de los examinadores, cierta actitud sospechosa en una de las personas que se encontraba examinando.
Tras la finalización de dicho examen, por un Agente del Grupo de Investigación y Análisis de Tráfico de la Guardia Civil (G.I.A.T.) de Segovia, se procedió a realizar un registro corporal externo a dicha persona, un varón de 49 años, de origen marroquí y residencia en Valladolid. En ese momento se pudo corroborar que, efectivamente, dicha persona portaba camuflados entre su vestimenta varios dispositivos electrónicos consistentes en un “pinganillo”, una cámara de botón, un transmisor y una antena, dispositivos necesarios para comunicarse con una tercera persona que, a la vista de las preguntas del examen mediante dicha cámara, le facilitaba las respuestas al oído.
Hay que hacer constar que, en la última reforma efectuada de la Ley sobre Tráfico, Circulación de Vehículos a Motor y Seguridad Vial se ha incorporado un nuevo apartado en el que se indica expresamente que en las pruebas para la obtención y recuperación de permisos o licencias de conducción se ha detectado un fraude habitual consistente en la utilización de dispositivos de intercomunicación no autorizados durante el examen, conducta que ya está siendo sancionada como infracción muy grave y que conlleva, además de la correspondiente multa, la imposibilidad de volver a presentarse a las citadas pruebas en el plazo de seis meses, procedimiento que se llevó a cabo con la persona indicada.