La provincia de Segovia vuelve a brillar una vez más después de que el Comité de Certificación Sectorial para Espacios Naturales Protegidos del Instituto para la Calidad Turística Española haya decidido renovar la marca 'Q' de Calidad Turística para los parques naturales de las Hoces del Río Duratón y las Hoces del Río Riaza. Una renovación que se produce después de superar la auditoría de seguimiento a la que se someten los espacios protegidos que cuentan con la acreditación.
Cabe recordar que las Hoces del Río Duratón se convirtieron en 2004 en el primer espacio protegido de Castilla y León, y uno de los primigenios en España, en conseguir esta distinción tan importante. Por el otro lado, las Hoces del Río Riaza, que discurren por Maderuelo, Valdevacas de Montejo y Montejo de la Vega, recibieron la 'Q' de Calidad Turística en 2015.
Castilla y León, la Comunidad con más espacios naturales protegidos acreditados
Castilla y León es la Comunidad de España con más espacios naturales protegidos que están en posesión de la 'Q' de Calidad Turística después de renovar dicho sello en 10 parques. Una marca que aporta diferenciación, prestigio, rigor y fiabilidad a los establecimientos y espacios turísticos certificados.
La gala 'La Noche Q 2023', enmarcada en Fitur, tuvo lugar la semana pasada en la Galería de Cristal del Palacio de Cibeles del Ayuntamiento de Madrid. Un evento que persigue reconocer a las organizaciones turísticas y empresas que apuestan por la calidad certificada y que contó con la visita de la ministra Reyes Maroto y Miguel Mirones, presidente del Instituto para la Calidad Turística Española.
Este galardón certifica los servicios, actividades y equipamientos de uso público que ofrece el espacio protegido, tanto a través de entidades concesionarias como directamente. La norma de calidad establece una serie de criterios en la oferta de equipamientos y servicios que garantizan la mejora en la atención a los visitantes, así como una mayor satisfacción de la visita.
Este sistema de calidad no pretenda ser un reclamo turístico, sino constituirse en un proceso por el que se alcance asegurar la calidad de los servicios de uso público, considerando en especial los objetivos que deben cumplir todos los espacios protegidos.
Aspectos como la educación ambiental y la interpretación del patrimonio, la atención y la información al visitante, la seguridad, la adecuada señalización de los senderos, la mejoría, el mantenimiento de los recursos destinados a facilitar la visita, la planificación anual y la atención personalizada de las quejas y sugerencias son algunos de los que se contemplan dentro de la norma y en los que se trabaja durante este tiempo en los espacios acreditados.
Durante el 2023 y 2024 se llevarán a cabo los ciclos de auditorías para los espacios naturales protegidos de Castilla y León y la renovación en 2025.