El Museo Rodera Robles de Segovia vuelve a convertirse en una espectacular galería fotográfica de la mano de ‘Manuel Riosalido (Foto Rio). El valor de la mirada (VI)’, una nueva exposición formada por una selección de instantáneas del archivo de Manuel Riosalido, Foto Río, un fotógrafo, cuya cámara captó durante los años 50 y 60 la vida política, social y cultural de la ciudad y provincia, así como sus paisajes y escenas rutinarias.
Esta exposición que desde hoy decora las paredes de este emplazamiento de la capital segoviana, muestra la ciudad de aquellos años y reactiva la memoria de sus visitantes a través de más de 60 instantáneas que permiten viajar, por ejemplo, a una avenida Padre Claret que parece no haber abandonado nunca las obras, a una Cuesta de los Hoyos con menos vegetación que la que la cubre ahora, a una calle San Juan estrechada por sus construcciones a ambos lados o a una plaza de Los Huertos en la que los viandantes alimentan a las cigüeñas.
Y es que, cabe destacar que la muestra fotográfica se completa con los artilugios y objetos propios de aquella época, cedidos para la exposición por los habituales escuderos de Foto Rio en el Museo Rodera Robles: Juan Ignacio Davía, Juan Pedro Velasco, Tomás Ortiz y Mariano Mate. En palabras de la Diputación provincial, institución colaboradora con la exposición, los "responsables de que la exposición tenga sentido y color, y no sea únicamente una sucesión de imágenes en blanco y negro".
‘Manuel Riosalido (Foto Rio). El valor de la mirada (VI)’, la sexta exposición de fotografías procedentes de archivo de Riosalido, permanecerá abierta al público desde esta misma tarde a las 19:00 horas, cuando la muestra será inaugurada, hasta el próximo mes de diciembre. Esta se podrá visitar de martes a sábado de 10:30 a 14:00 horas y de 17:00 a 19:00 horas.
Tal y como ha destacado el presidente de la Diputación y del Patronato de la Fundación del Museo, Miguel Ángel de Vicente, "el archivo Foto Río es inagotable y su valor, incalculable, porque cuando parece que hemos perdido algún recuerdo, sus fotografías nos activan la memoria y nos devuelven a las calles de una ciudad que, poco y algo, al mismo tiempo, tiene que ver con lo que era a mediados del siglo XX".
Junto a Rafael Cantalejo, director del Museo, y al hijo de Foto Rio, José Manuel Riosalido, el presidente de la institución provincial ha aprovechado la ocasión para confesar que "parece mentira que después de cinco exposiciones, aún nos sorprendan algunas de las fotografías que conserva el archivo”, haciendo referencia a la colección de cerca de 210.000 negativos que José Manuel Riosalido se ha dedicado a digitalizar en su totalidad, durante los últimos años, con cariño y respeto hacia el trabajo de su padre.