En la provincia de Segovia se va a volver a construir un foro de networking e intercambio de conocimientos y experiencias profesionales por la segunda edición de la Cantera de Talento.
El objetivo es movilizar y promover el talento empresarial de Segovia. Una iniciativa que cuenta con el apoyo de la Diputación, a través de su Área de Promoción Provincial y Desarrollo Rural Sostenible.
Esta actividad se va a desarrollar el próximo 22 de octubre, en El Rancho de la Aldegüela, en Torrecaballeros. Así lo ha hecho público este miércoles Magdalena Rodríguez.
Con este evento se apuesta por la cohesión territorial a través de la colaboración público-privada, orientada al desarrollo económico.
Además, se conecta con empresas para generar nuevos tejidos empresariales que sirvan de oportunidad para afrontar el reto demográfico.
De este modo, será un espacio para visibilizar negocios y empresas emergentes en la provincia y fomentar relaciones y proyectos consolidados.
Así, en esta jornada central de la segunda Cantera de Talento, esas empresas emergentes podrán darse a conocer mediante un concurso de presentaciones, que contará con el apoyo de los cuatro Grupos de Acción Local presentes en el territorio segoviano.
Que son la Federación Empresarial Segoviana (FES), la Asociación de Jóvenes Empresarios (AJE), la Cámara de Comercio y la Fundación Caja Rural.
Además, se entregarán premios en el cóctel para las tres mejores presentaciones: un lote de Alimentos de Segovia a cada una de tres empresas que hayan planteado una mejor presentación, entre las doce participantes.
Así, las empresas consolidadas que han confirmado su presencia en esta segunda entrega de La Cantera de Talento van a servir de ejemplo e inspiración a esos nuevos proyectos.
Son Verescence, Autocares Bayo, Plásticos Riaza, Cárnicas Tabladillo, El Pinar Berries, Obrador Concepción Moreno, Muebles Rodrigo, Terrabuey, Embutidos San Ignacio, Cartonajes Juárez y Finca El Rancho.
La inauguración será a cargo de la vicepresidenta segunda de la Diputación y responsable del Área de Promoción Provincial y Desarrollo Rural Sostenible, Magdalena Rodríguez.
Posteriormente, se sucederán los turnos de presentaciones de las empresas emergentes, según el área de influencia del Grupo de Acción de Local al que pertenecen (Campiña Segoviana, Nordeste, Segovia Sur y Tierra de Pinares) y el presidente de la Diputación, Miguel Ángel de Vicente compartirá la pausa para el café con todos los presentes.
Finalmente, la jornada se va a cerrar con una actividad conjunta, antes del mencionado cóctel con networking, en el que se anunciarán las tres presentaciones ganadoras.
X Aniversario La Olmeda
La Unidad de Convivencia La Olmeda, ubicada en el Centro de Servicios Sociales La Fuencisla, cumple su primera década de andadura.
Para conmemorarlo, el presidente de la Diputación de Segovia, Miguel Ángel de Vicente, ha querido acercarse para felicitar, a los residentes y profesionales que forman parte de esa unidad.
Se trata de las primeras características que puso en marcha la institución provincial, como modelo para las personas que viven en sus centros residenciales.
Es un modelo que pone a la persona en el centro y que busca configurar el espacio como lo que es, su hogar en una etapa de su vida, alejándose por tanto de una visión de hospital.
De esta manera, el pasado 15 de octubre de 2014 se inauguraba la unidad de convivencia La Olmeda, fruto del compromiso adquirido de modo convencido por la Diputación.
De Vicente ha puntualizado cómo la entonces consejera, Milagros Marcos, les habló del modelo a raíz de un viaje a Noruega.
Entonces, como diputado de Asuntos Sociales y este miércoles ya como presidente de la Diputación, ha podido comprobar el avance y crecimiento de este modelo organizativo.
Así, la institución provincial se ha adherido al pilotaje del proyecto ‘En mi casa’, impulsado por la Junta de Castilla y León, lo que permitió que La Olmeda apareciera como la primera unidad convivencial puesta en marcha en la red pública de centros en Segovia.
Un carácter pionero que mantiene, puesto que, ante nuevas situaciones, los responsables piensan “cómo se actúa en La Olmeda”, tal y como ha reconocido la directora del CSS La Fuencisla, Carmen Galán.
Tanto De Vicente como ella han remarcado el esfuerzo y el compromiso del personal que ha atendido durante esta década la unidad de convivencia, porque es una de las claves de su éxito.
“Hace diez años pensábamos que probablemente sería bueno atender a las personas de esta forma, a ver qué tal se daba, sin saber el resultad cierto a medio o largo plazo, y hoy estamos seguros de que es el escenario ideal a nivel institucional".
"Ha sido duro, pero gracias a estas pioneras es ya una realidad del día a día en el centro”, como ha señalado Carmen Galán.
Por su parte, el presidente de la Diputación ha recordado que una década atrás “nadie se creía que esto se podía poner en marcha, ya que era inconcebible tener en cuenta gustos o preferencias”.
Lo cierto es que desde bien pronto se ha podido comprobar que se debía trabajara para asemejar lo máximo posible el medio residencial al de un hogar.
Y procurando la mayor participación de la persona, la implicación de su entorno familiar, además de empoderar la figura del profesional de referencia, como valedor del proyecto de vida de la persona en el centro.
Una muestra del éxito son también las visitas recibidas a lo largo de estos años por parte de otras residencias, asociaciones, centros de estudios, profesionales de servicios sociales básicos e incluso particulares, a nivel provincial, pero también nacional y europeo.
Todas querían conocer de primera mano la metodología que desde La Olmeda se había puesto en marcha para la implantación de este modelo de atención que tiene a la persona como centro.
De esta manera, La Olmeda cuenta con unas instalaciones que engloban áreas comunes de salón-comedor y cocina, y espacios privados constituidos por doce habitaciones con baño, de las que nueve son individuales y tres, dobles.
También, presenta capacidad para quince personas. En esta década han sido treinta y dos los residentes.
En total, han pasado por una unidad de convivencias que se encuentra situada en la planta baja del edificio y que posee acceso propio a una zona de terraza en el exterior.
Tres de las catorce personas que arrancaron en 2014 aún viven en la unidad y la plantilla de trabajadoras se ha mantenido también en gran medida.