Lucía Sánchez / ICAL

Bajo la insignia de la fíbula del caballito de Numancia nace SoriaPhone S.L, la primera teleoperadora de la provincia sin ánimo de lucro, que llega con el ánimo de digitalizar a la España más vaciada y que el capital de los sorianos redunde en el territorio. Salvador Habbib Gutiérrez y Sara Paños Dennerlein emprenden en plena pandemia y ponen en servicio su empresa, que ofrece telefonía móvil y datos de internet a los sorianos con la filosofía de reinvertir el beneficio que obtengan en cubrir las zonas negras de cobertura y ofertar bonos para que los sorianos paguen cada vez menos por tener las comunicaciones propias del siglo XXI.

Han tardado un año en poner en marcha el proyecto y la empresa entró en servicio el 27 de enero con 75 abonados. Salvador Habbid decidió reinventarse, tras sufrir un accidente de moto. Anteriormente gestionaba una empresa de animación y tiempo libre, pero la imposibilidad de moverse marcó “un punto de inflexión” en su trayectoria laboral. 

Su amigo, Emilio Utrilla de Segovia que gestiona la empresa Nodesnet, y es uno de los miembros del G-100- grupo que participa en la co-creación de la llamada ‘Nueva ruralidad’, le explicó su proyecto para llevar la fibra óptica en las zonas rurales del Nordeste de Segovia y las Tierras Altas de Soria y como funciona el complejo sistema de teleoperadoras en España. De este modo pensó que Soriaphone podría complementar esa operadora porque el “móvil lo utiliza muchísima gente”. 

“La filosofía del proyecto que Soria tenga una operadora propia para que toda la provincia, a la larga, tenga una cobertura 4G, con el operador que sea, no hablo de una fibra que sería un segundo objetivo. Que todas las poblaciones tengan cobertura 4G sea con el operador que sea”, explica.

Las ofertas de la nueva empresa de momento sólo dan cobertura Movistar pero en breve lo harán con otras compañías para tener el 100 por cien de las 38 ‘zonas negras’ del medio rural. “Con los beneficios que obtengamos iremos mejorando las infraestructuras en lo que a velocidad mínima se refiere”, avanza. 

El paso siguiente, según relata el emprendedor sería dotar al medio rural de un cordón de fibra propia para que todos los pueblos estuvieran conectados. “Ofertamos telefonía móvil e internet sin cables. Pueden contratar directamente pero la diferencia está en los precios y, sobre todo, dónde va el beneficio. Si Movistar gana un 60 o un 40 por ciento por cada cliente nosotros hemos bajado los precios hasta el punto que nuestro margen de beneficio se nos queda en un 10 por ciento. Además, ese beneficio se queda en la provincia, por lo que el capital soriano no se marcha a otros países”.

Han sido muchos los trámites burocráticos que han tenido que realizar para poner en marcha SoriaPhone, uno de los más largos y costosos fue que la Comisión Nacional de Mercado de Comunicaciones diera el visto bueno al proyecto, además, la pandemia ralentizó, aún más, la puesta en funcionamiento de la operadora.

En este sentido, el empresario recuerda que el espectro radiofónico de voz y datos está asignado por el Gobierno y lo tienen entre cuatro grandes operadoras, y agrega que nadie puede hacerse un hueco, por lo que las pequeñas que se crean se ven obligadas a alquilarles el espectro. Es por ello que el G-100 trabaja para  conseguir que las zonas de escasa importancia en lo que a telecomunicaciones se refiere obtengan unos permisos especiales para que puedan crear su espectro propio. “Para las cuatro operadoras grandes de España los pueblos de tres o cuatro habitantes tienen poco o nulo interés”, recuerda.

De zona negra a zona blanca



Soriaphone mantiene reuniones con ayuntamientos y asociaciones de vecinos que no tienen cobertura móvil en su pueblos. En primer lugar les realiza un estudio gratuito para valorar la posibilidad de poner un repetidor de señal al menor coste posible. En algunos casos es suficiente con poner un repetidor o amplificador y en otros es imposible porque es necesario poner una estación base. “Cada caso es distinto e incluso se puede dar el caso que no se puede dar servicio. Durante la pandemia me ha llamado gente que quería teletrabajar y me han explicado lo que pretendían hacer con el ordenador en el pueblo y hemos tenido que decir lo siento pero ese servicio no te lo doy porque no es de calidad por el tema de la velocidad”, especifica.

Es ahí dónde entra en juego el papel fundamental que tienen las administraciones para digitalizar el medio rural. En este sentido, Salvador Habbib adelanta que presentará sendos proyectos a la Diputación de Soria (valorado en 20.000 euros) y a la Junta (100.000) con el fin de comenzar a poner las instalaciones necesarias en las zonas sin cobertura de Soria.

De momento, la empresa invirtió 30.000 euros y no espera grandes beneficios a corto plazo. Es más, es consciente de que si la institución provincial y el Gobierno autonómico le ayudan a poner en marcha el proyecto deberá aportar capital por valor de al menos 100.000 euros. “Con la Diputación ya hemos entablado reuniones para trabajar y hay buenas perspectivas, ya que uno de sus objetivos es conseguir que el medio rural tenga cobertura rápida. El proyecto plantea que en menos de dos años todos en los pueblos de Soria puedas llamar por el móvil y tener internet”, especifica.

Los emprendedores han comprado un local en Golmayo para visibilizar su empresa y prevén alquilar un pequeño local en la capital para darse a conocer. Una de las bazas con las que van a jugar es que prestan el servicio personalizado, es decir, que un cliente tiene un problema con la línea y se le atiende de forma instantánea y no por medio de un máquina que da tres opciones al cliente y le mantiene a la espera 20 minutos para “en el mejor de los casos” resolverle el problema tres días después. “La atención es personal nunca sale una máquina sale una persona, que no solo te vende el producto sino que atiende tus necesidades, es decir, te pregunta para qué quieres contratar el servicio, cuál es el consumo de datos y en qué sitios te mueves con el fin de ofrecer el mejor paquete posible al menor coste posible”, cuenta.

Para los emprendedores, lo más importante es que los sorianos conozcan y sepan que el servicio funciona y que su dinero se queda en en el territorio. Es por ello que su trabajo está enfocado ahora en explicar a la gente su idea de negocio para que se identifiquen con él.