La Guardia Civil de Soria denunció al propietario de una explotación porcina de Muro por enterrar en una fosa de cinco metros cuadrados y dos de profundidad cadáveres de cerdos adultos, lechones recién nacidos y placentas. En total se hallaron siete fosas con cadáveres de cientos de animales.
Miembros de la Comandancia de la Guardia Civil de Soria procedieron a realizar una inspección en una granja porcina, en colaboración con los veterinarios del Servicio Territorial de Agricultura y Ganadería de la Junta de Castilla y León de Soria. En dicha inspección fue hallada una fosa cavada dentro de la explotación.
Tras la gravedad de los hechos se observó que toda la tierra alrededor se encontraba con síntomas de haber sido movida, se procedió con maquinaria a desenterrar alrededor de la fosa, y salieron numerosos cadáveres algunos en descomposición.
Los veterinarios estimaron que en unos 40 metros cuadrados se habían podido realizar siete fosas donde habrían sido enterrados cientos de animales en vez de incinerarlos. También, se comprobó que dicha empresa carecía de documentación sobre el control de las altas y bajas de los animales, así como de la gestión de los residuos.
Por tales hechos, se ha procedido a denunciar a la empresa por varias infracciones a la Ley de Residuos y Suelos contaminados, normativa Sandach, y Ley de Sanidad Animal.