Castilfrío de la Sierra (Soria) acogió hoy el funeral por el escritor y ensayista Fernando Sánchez Dragó y cientos de personas, entre ellas, el economista Ramón Tamames, el líder de Vox, Santiago Abascal, y la actriz Aitana Sánchez-Gijón quisieron arropar a su familia.
Sánchez Dragó, que falleció ayer a los 86 años de edad, tras sufrir un infarto, vivió “como quería”, según Tamames, quien ensalzó la figura de su amigo, que “tuvo la locura” de proponerle para la moción de censura contra el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez.
“Nos conocimos en el año 56 y desde entonces nos veíamos con frecuencia y hablábamos y escribíamos de todo”, rememoró el político español, quien subrayó que se quedó “anonado” por la noticia del repentino fallecimiento de su amigo. Tamames apuntó al carácter libre del polifacético Sánchez Dragó, quien hizo la “vida que le dio la gana”.
La localidad, de apenas 37 habitantes, lugar de residencia y retiro del escritor, perdió a su hijo más ilustre y la ciudad de Soria, a uno de sus hijos adoptivos, por lo que no faltaron al funeral los representantes de las instituciones sorianas y de Castilla y León.
El cuerpo del autor de ‘El camino del corazón’ descansó hasta las 18 horas en su residencia en Castilfrío, hora en la que se trasladó hasta la iglesia de La Asunción donde se celebró el funeral.
El líder de Vox, Santiago Abascal, se limitó a “acompañar” en el dolor a la familia y no realizó declaración alguna a los numerosos medios de comunicación que copaban la plaza de la iglesia.
Sin embargo, a su llegada, sí confío a uno de los concejales del pueblo sentirse apenado por la muerte de su intelectual de cabecera y artífice de su biografía. Además, le reconoció que el pueblo soriano le traía “muy buenos recuerdos”, ya que se trasladó en varias ocasiones hasta la residencia del escritor para fraguar ‘España vertebrada’.
Por su parte, el concejal de Cultura del Ayuntamiento de Soria, Jesús Bárez, afirmó que su relación con Sánchez Dragó fue “muy grata” y que, al igual, que otros muchos políticos y amigos de Sánchez Dragó también estuvo en su residencia para organizar eventos culturales.
“Como escritor fue muy justamente premiado y su carrera ha sido fructífera. Hay que agradecerle el apoyo que hizo para fomentar la lectura”, expresó.
Al funeral, oficiado por el párroco de la localidad, Ricardo Pancorbo, acudieron los vecinos de Sánchez Dragó, quien señalaron que en Castilfrío era “cercano y humano” y formaba parte del entramado social. Tal es así que su deseo fue descansar en el cementerio del pueblo que conoció a través de su padrastro.
Las campanas de la iglesia doblaron en memoria del ensayista madrileño, autor de 40 obras y padre de cuatro hijos, el más pequeño de diez años de edad.
Al funeral asistió la actriz Aitana Sánchez Gijón; la directora general de Políticas Culturales, Mar Sancho; la delegada territorial de la Junta, Yolanda de Gregorio: y el jefe de Cultura de la Delegación, Carlos de la Casa, entre otros. Por la mañana, el consejero de Cultura, Gonzalo Santonja, se desplazó hasta Castilfrío para dar el último adiós al escritor, que dentro de escasos días tenía previsto recoger el ‘Premio Castilla y León de las Letras’.