Admirable vivencia la de la velada de ayer que significó, encarnada como un solo cuerpo, una misma pasión rememorada por todos y cada uno de sus protagonistas. Para todos ellos el denominador común fue la carrera de torero que, en sus distintas facetas, sacó a la luz su respectiva pasión de enamorados por una profesión dura, pero a la vez agradecida y plena de valores humanos.
Pasearon por la tarima del Salón Gerardo Diego del Casino de Soria el recortador soriano Víctor Vela; los novilleros Manuel Jesús Carrión y Alberto Donaire; los toreros de plata Fernando García Junior (representado por la médico nutricionista Paloma González Ruiz), Andrés Revuelta y Fernando Sánchez y los matadores de toros Fernando Robleño y José Luis Palomar; pasado, presente y futuro; ayer, hoy y siempre.
Ante un recinto colmado hasta la bandera de aficionados que vibraron con las prosas de los premiados y conductor del acto, el periodista de casa Raúl Alonso, todos alumbraron la estrella de un evento ameno que brilló por su dinamismo, justeza y precisión en las intervenciones, memoria de sensaciones vividas y deseos ilusionantes del porvenir, de los protagonistas en primera persona que, por su turno, se dejaron ver; ramo de la siempreviva afición taurina que goza salud de toro, y bravo.
Hasta el empresario de la plaza, Juan Antonio Medina (BullStar Espectáculos, S.L.) que gozó invitación para entregar uno de los trofeos, fue reclamado para pulsar sus sensaciones tras su primera temporada de gestión, al frente del Coso de San Benito soriano. Dijo estar satisfecho, aunque con matices y promesas de enmiendas y anunciar sorpresas para el año 2024.
Y ya todos ansiosos de un nuevo “Paseo de las Cuadrillas”, en poema de Gerardo Diego, que asienta, “Vibra el clarín llamaradas. La brisa insinúa el paso y el jardín de tres espadas abre sus flores de raso. Furioso el sol en las flores embiste y brillos tenores encarniza al alamar. Sombra. Donaire. Desgaire. Y girando por el aire vuelan las flores al mar”.
Con la Fiesta Brava ¡vibramos! ¡apasionamos! ¡vivimos! ¡comulgamos! Es nuestra religión.