Agentes de la Unidad de Protección de la Naturaleza (Seprona) de la Comandancia de la Guardia Civil de Soria, en concreto de la patrulla de Almazán observaron en horario nocturno haces de luz procedentes de terreno cinegético cercano a la localidad de Medinaceli que se proyectaban desde el interior de un vehículo todoterreno en movimiento.

Fue por esto que la patrulla realizó un seguimiento y dio el alto al vehículo para identificar a los tres ocupantes y realizar un control encontrándose en el interior diversos elementos auxiliares para la caza como prismáticos, linternas, visores términos y nocturnos y también navajas. Hasta un saco destinado como apoyo para rifle encontraron.

En el habitáculo del vehículo destinado a pasajeros, en el asiento trasero, hallaron un rifle dispuesto para hacer fuego. Realizadas las comprobaciones oportunidad se comprobó que el rifle era propiedad del copiloto. Dicha arma, con su guía de pertenencia, ha sido intervenida y depositada en la Intervención de Armas de la Guardia Civil de Almazán, quedando el resto de efectos aprehendidos en depósito de las dependencias de la Patrulla del UPRONA de Almazán.

Los hechos han sido puestos en conocimiento del subdelegado del Gobierno de la provincia en Soria por diversas infracciones cometidas a la Ley Orgánica 4/2015 de Seguridad Ciudadana en concordancia con el Reglamento de Armas, y ante delegada Territorial de la Junta de Castilla y León de Soria por infracciones a la Ley 4/2021 de caza y gestión sostenible de los recursos cinegéticos de Castilla y León y Ley 4/2015, de 24 de marzo, del Patrimonio Natural de Castilla y León.

Estas infracciones conllevan sanciones que pueden ir desde los 601 euros a 10.400 euros, y además, pueden acarrear la retirada de la licencia de caza e inhabilitación para obtenerla durante un plazo comprendido entre uno y tres años.