El Pleno del Ayuntamiento de Valladolid ha aprobado el estudio y posterior creación de una tasa para gravar el aprovechamiento del dominio público del que disfrutan las compañías energéticas de gas, de agua e hidrocarburos que, de acuerdo con varias sentencias judiciales, deben pagar a los municipios a los que suministran por aire, suelo o subsuelo un 1,5% de su facturación en el término local.

Esta propuesta, planteada por el Grupo de Sí Se Puede, ha sido uno de los acuerdos tomados en el Pleno correspondiente al mes de abril. De las seis mociones presentadas se han aprobado, en cierta manera, todas menos las tres que defendía el Grupo Municipal Popular.

En la propuesta, defendida por la portavoz de Sí Se Puede, Charo Chávez, se plantea realizar dos estudios. Uno para determinar las construcciones de este tipo situadas en el término municipal, y otro estudio económico para comprobar el impacto económico que puede tener en los ingresos del Ayuntamiento. En tercer lugar, se desarrollará una propuesta de ordenanza que regule la tasa.

La mayor parte de los grupos políticos -PSOE, SíVA y Ciudadanos- han mostrado su acuerdo con el cobro de esta tasa, si bien han reconocido que se debería evitar la posibilidad de que el tributo se traduzca en una subida de las tarifas. Sólo el concejal del PP Alfredo Blanco ha argumentado posibles aspectos que desaconsejarían este nuevo gravamen, ya que entiende que un informe de la FEMP se posiciona señala posibles inconvenientes.

En todo caso, Chávez ha defendido que ese informe aludido por Blanco se tomará en cuenta para realizar el estudio económico que se ha aprobado como una de las propuestas, al tiempo que ha reprochado que sea el PP quien "una vez más" se pone "del lado de las grandes corporaciones" en lugar de a favor de los intereses municipales que supondrían más ingresos. A este respecto, el concejal de Urbanismo, Manuel Saravia, ha ironizado con que "los lomos" de las empresas eléctricas son "lo suficientemente anchos" como para soportar este gravamen.

En este debate, el alcalde ha hecho por primera vez uso de la palabra para preguntar a Alfredo Blanco si las "disquisiciones" planteadas en este asunto se las hizo cuando, como concejal de Hacienda del PP, se aprobó la tasa de recogida de basuras, que fue anulada por el nuevo equipo de Gobierno en 2015.