El BSR Valladolid necesita ganar al Zuzenak para aspirar al título
El BSR Valladolid afronta los dos últimos partidos de la liga regular con la necesidad de ganar ambos para colarse en la Final Four y poder disputar el título de liga. El primero de esos compromisos será este sábado, en el último encuentro que se disputará en el Pilar Fernández Valderrama, ante el colista de la clasificación, el Zuzenak de Vitoria, y el segundo, en un cara o cruz, ante su rival directo por este objetivo, el Bidaideak Bilbao.
Los vallisoletanos han conseguido llegar al tramo final de la temporada con las opciones intactas para entrar en la eliminatoria por el título liguero, tras su gran participación en la Copa de Europa Willi Brinkmann, en la que quedaron subcampeones, pero necesitan sumar en los dos partidos que restan, de ahí que la plantilla se haya preparado con intensidad esta semana.
El técnico del equipo, José Antonio de Castro, cuenta para este primer choque ante el Zuzenak con las dudas de Jonatan Soria, al que le están haciendo pruebas, y Pablo Lavandeira, que tiene una herida en la espalda, aunque confía en que ambos puedan disfrutar de algún minuto de juego ya que, por sus puntuaciones funcionales, son fundamentales en el esquema táctico.
El conjunto vasco, en el que milita un viejo conocido de los vallisoletanos, Pablo López “Piti”, llega a Valladolid con una necesidad máxima, ya que precisa ganar los partidos que le restan para tratar de escapar del descenso, aunque en esta temporada tan solo ha podido llevarse la victoria en uno y, por tanto, su lucha se presenta complicada. En este sentido, De Castro ha advertido sobre el “juego entusiasta” de los de Vitoria, ya que se trata de un equipo joven, y también sobre su “dura defensa”, por lo que ha pedido a sus jugadores la máxima concentración desde el primer minuto para evitar sorpresas y para tratar de controlar el partido hasta el final.
Lalo Prieto se queda en Valladolid tres temporadas más
El Fundación Grupo Norte continúa asentando la plantilla para la próxima temporada, y la pieza más importante en el esquema del equipo seguirá estando en el centro del puzzle morado, ya que Lalo Prieto ha prorrogado su vinculación con el conjunto vallisoletano por tres temporadas más, lo que le llevará a cumplir siete años en la capital del Pisuerga.
El pívot mexicano se ha convertido, por méritos propios, en el jugador fundamental dentro del sistema táctico de José Antonio de Castro, y no solo por su capacidad de trabajo y liderazgo y su dedicación y entrega, sino también por su personalidad, que le hacen ser muy apreciado por todos sus compañeros.
La negociación con el jugador ha sido muy sencilla, puesto que él quería seguir en Valladolid y el club quería seguir contando con su buen hacer, y además Lalo Prieto tiene un objetivo claro en su mente: lograr un título con el Fundación Grupo Norte, algo que ha estado a punto de cumplir este año en la Copa del Europa Willi Brinkmann, pero que finalmente se escapó de entre los dedos.
Junto al argentino Adrián Pérez y su compatriota Luis Eduardo Jasso, Lalo Prieto ha formado un potente trío que ha permitido al Fundación Grupo Norte alcanzar muchos sueños, el último de los cuales aún sigue pendiente, ya que quedan dos jornadas de liga y mantienen las opciones de poder disputar la Final Four. Además, el pívot mexicano ha demostrado estar comprometido con los valores del club y es uno de los más implicados con proyectos de la entidad como las charlas en los colegios, que permiten normalizar la situación de las personas con discapacidad y acercar el baloncesto en silla de ruedas a los más jóvenes.
Eduardo Geovani Prieto Barragán -que es el nombre completo de Lalo- ha promediado 14 puntos esta temporada en la División de Honor de Baloncesto en Silla de Ruedas, además de 10.6 rebotes y 5.4 asistencias, lo que evidencia su gran calidad. La máxima puntuación la logró ante Gran Canaria y Mideba Extremadura, con 23 puntos y, con sus 22 puntos anotados ante el Ilunion, contribuyó en gran medida a terminar con una racha de varias temporadas de imbatibilidad del equipo madrileño.