El Uni cierra la temporada en casa con una victoria
Nunca es tarde, y menos si es para volver a ganar. El Universidad de Valladolid afrontó la penúltima jornada de Liga con el objetivo de ganar en su despedida de Fuente la Mora. Lo logró, pero tuvo que trabajar duro para ello y así vencer a un correoso Tres Cuñados (5-3), aunque afectado por las bajas.
El fallecimiento de uno de los integrantes de la plantilla gallega hace unos meses en un trágico accidente de tráfico, hizo que el conjunto universitario le rindiera homenaje con una camiseta entregada a su hermano Bruno, capitán este sábado en Fuente la Mora.
Con los dos equipos sin objetivos ambiciosos, ambos salieron sin presión y a disfrutar. El Uni trató de llevar el timón al inicio, en el que dispuso ocasiones, pero su rival también gozó de varias bien resultas por David. El partido estaba bonito.
La primera rotación dio un punto más a los vallisoletanos, con Dani Martín, Balle y Adri. El segundo sirvió un balón para que el tercero inaugurase el marcador, a los 8 minutos, llegando desde atrás. Una jugada fácil, sencilla y muy efectiva.
En una acción muy parecida a la del primer tanto, los locales anotaron el segundo. Miguelín se cambió por Balle y Adri firmó su doblete en 14 minutos.
Pese al 2-0, el ritmo no bajó y el choque continuó con su atractivo. Eso sí, ninguno de los dos equipos logró meterle mano al otro en el tramo final de la primera parte. La intensidad no se perdió tras el paso por vestuarios, ya que el Uni buscaba ampliar su ventaja y el Tres Cuñados reducirla.
Ocurrió lo segundo. Bruno cogió el balón en el centro del campo, sacó su calidad y, con un disparo más ajustado que potente, entre rivales y defensores el balón se coló en la portería de Víctor. El capitán de los gallegos miró al cielo, adonde levantó los índices, y dedicó el gol a su hermano.
El gol dejó tocado a un Uni que poco después encajó el empate. Dilín encontró el hueco entre la tapada de Víctor y otro par de defensores para colocar el 2-2 en el 27'. Lejos de hundirse, los de Kike Molina, que vio el partido desde la grada por sanción, apretaron y consiguieron su objetivo.
Balle tuvo que tirar varias veces para hacer el tercero, pero finalmente lo logró. El visitante Bruno vio la segunda amarilla por mano y los vallisoletanos, en superioridad, marcaron el cuarto por medio de Isaac, que aprovechó un buen pase al segundo palo de Dani Martín. Todo ello en tres minutos de una locura que les reforzó.
A falta de 7 minutos para la conclusión, los gallegos lo pusieron todo sobre la pista. Viajaron con seis futbolistas de campo y dos porteros, por lo que, con la expulsión de Bruno, Petolas se puso la camiseta de portero-jugador para tener a los cinco en la cancha.
Los gallegos aprovecharon un error local para ponerse a un gol de diferencia, gracias al tanto de Dilín en una rápida acción. Quedaba cuatro minutos y nada estaba decidido. Además, el Tres Cuñados forzó la quinta falta del Uni y puso en peligro el triunfo. Víctor realizó dos intervenciones de mucho mérito para dar un empujón a su equipo. Surtió efecto, ya que Ofa, muy escorado, sacó un disparo que pegó en un defensa y entró.
La ventaja no era amplía y restaban dos minutos en los que podía pasar de todo. En ese momento reapareció un estelar Víctor para detener un doblepenalti y repeler un buen lanzamiento, lo que permitió mantener el definitivo 5-3.
Tras despedirse de Fuente la Mora con un necesario triunfo, el Universidad de Valladolid disputará la última jornada en la pista del Cuéllar.