Prisión por una estafa muy 'turística'
La pareja acusada de estafar 23.500 euros a un matrimonio con la falsa promesa de adquirir dos vehículos para el transporte de viajeros entre el aeropuerto de Buenos Aires y las cataratas de Iguazú ha aceptado condenas de un año de cárcel para cada uno tras reconocer su culpa y llegar a un acuerdo con las acusaciones pública y particular.
La sentencia de conformidad alcanzada supone que Gonzalo V, de 35 años, y su esposa Natalia H.V, que se exponían cada uno a dos años de cárcel, aceptan cada uno un año y se comprometen a devolver el dinero estafado, 5.000 euros aportados en metálico en el mismo acto del juicio en la Audiencia de Valladolid--la vista no se ha llegado a celebrar--con el compromiso de restituir el resto a razón de 300 euros mensuales, según informaron a Europa Press fuentes jurídicas.
Los hechos se produjeron en 2014, cuando la pareja acusada ofreció a María T.B.G. y su esposo David D.P. invertir en un negocio consistente en la compra de vehículos para el transporte de pasajeros desde el Aeropuerto Internacional de Buenos Aires a las cataratas de Iguazú.
Los estafadores prometieron a sus víctimas beneficios netos mínimos de 1.700 euros y, para dar apariencia de formalidad y seriedad a su propuesta, G.V. suscribieron con la pareja a la que ofrecieron el negocio, el 12 de noviembre de 2014, un contrato ante notario en Valladolid.
Por su parte, las víctimas le otorgaron un poder especial para que gestionase ante la autoridades tributarias argentinas su inscripción como arrendadores de vehículos en los registros que fuera necesario, abriera cuentas bancarias en Argentina, adquiriera hasta un máximo de dos vehículos y para todo ello firmara cuantos documentos públicos o privados fueran precisos o convenientes.
Al día siguiente, en cumplimiento de lo pactado, la mujer de la pareja víctima del engaño entregó a la acusada 13.000 euros.
Tiempo después, en febrero de 2015, la pareja víctima de la estafa constituyó la sociedad Argenco-SF, S.L, que tenía por objeto el negocio de alquiler de vehículos. Confiada en la realidad y rentabilidad del negocio, María T.B.G. consiguió que se suscribiera un contrato de préstamo entre una persona y la sociedad recientemente creada por importe de 15.000 euros con el fin de comprar otro vehículo, para lo que entregó a la acusada otros 11.800 euros.
El acusado, con el fin de dar apariencia externa de solidez económica, remitió un contrato de colaboración suscrito entre Argengo Go Turismo y Argengo Servicios con una empresa de servicio de transporte de vehículos y un certificado de colaboración entre la sociedad que había creado la pareja víctima de la estafa y la argentina Argengo Turismo MC.
Sin embargo, a pesar de todas estas formalidades y la entrega del dinero a la pareja formada por Gonzalo V. y Natalia H.V, éstos incumplieron lo pactado y ni adquirieron los vehículos en los que supuestamente tenían que haber invertido las cantidades recibidas ni las devolvieron, a excepción de 1.300 euros que entregaron en marzo de 2015.