'Esto no es la casa de Bernarda Alba' llega al Calderón

Un elenco formado casi íntegramente por hombres (a excepción de una mujer) vivirá en primera persona la opresión que sufren las mujeres en una reinterpretación de la obra de Federico García Lorca que declara sus intenciones desde el título, porque 'Esto no es la casa de Bernarda Alba'.

"En esta casa, la única salida para las mujeres era por medio de un hombre y la única alternativa, el suicido", ha recordado, en declaraciones recogidas por Europa Press, el dramaturgo y director de la Escuela Superior de Arte Dramático de Castilla y León (Esadcyl), José Manuel Mora, sobre la obra original, con la que ha "dialogado desde el presente" y sobre la que se ha tomado ciertas "licencias", aunque todas ellas "al servicio del latido" del texto de Lorca.

Así, el actor Eusebio Poncela interpreta a una Bernarda Alba obligada a adquirir un rol masculino para imponer su autoridad, un tipo de opresión social "arquetípica" que el intérprete vive en sus propias carnes y a la que aporta, además, cierto "sentimentalismo".

La obra se representará desde este viernes y hasta el domingo en el Teatro Calderón de Valladolid con una perspectiva de género "muy actual", según ha indicado la concejal de Cultura y Turismo, Ana Redondo, pues el feminismo es una de las "batallas pendientes" de la sociedad, ha destacado.

En este sentido, se ha enorgullecido del entorno "reivindicativo y exigente" en el que se estrena la obra por tratarse de una fecha cercana al 8 de marzo, Día de la Mujer, y fecha en la que se celebrará la huelga feminista de carácter internacional.

Dirigida por Carlota Ferrer, 'Esto no es la casa de Bernarda Alba' también cuenta en su reparto con Igor Yebra, Óscar de la Fuente, David Luque, Jaime Lorente, Julia de Castro, Diego Garrido, Arturo Parrilla y Guillermo Weickert. Todos ellos, ha apuntado la directora, dan vida a los personajes femeninos desde la voz que les atribuyó Lorca para poner "en boca de hombres el drama de las mujeres" y otorgarle así una "mayor universalidad".

En el libreto original, los personajes manifiestan el deseo de ser hombres para poder gozar de libertad. Sin embargo, esta reinterpretación del clásico sirve para mostrar la "opresión" de la mujer ante la "visión dominante del orden heteropatriarcal" y su gestión del mundo a través del "miedo", por lo que se presenta como un "canto a la libertad" que da voz a las mujeres de una manera "reivindicativa", ha explicado Ferrer.

Sin embargo, la reasignación de los roles de los personajes no será la única "sorpresa" de la renovada versión de 'La casa de Bernarda Alba', pues su directora ha prometido, además, un "final alternativo" acorde a 2018.