Rostro imprescindible de nuestro cine, Verónica Forqué subirá el próximo mes de marzo al escenario del Auditorio Municipal de Medina del Campo para recoger, en el marco de la trigésimo segunda Semana de Cine, el Roel de Honor del festival.
El certamen medinense, que se celebrará entre los próximos 8 y 16 de marzo), reconoce, así, la importante e intensa carrera de Forqué, aún en activo, que incluye su interpretación en más de cuarenta títulos en cine, una veintena de obras de teatro y más de veinte series en televisión. Verónica Forqué, una de las actrices españolas más laureadas y premiadas, cuenta con cuatro premios Goya por su interpretación en La vida alegre, El año de las luces, Kika y Moros y cristianos.
Hija del director y productor José María Forqué y de la escritora Carmen Vázquez-Vigo, Verónica Forqué (Madrid, 1955) estudió arte dramático y comenzó la carrera de Psicología, que no llegó a terminar. Su debut en el cine llegó en 1971, cuando se puso a trabajar a las órdenes de Jaime de Armiñán en Mi querida señorita.
Desde entonces, Forqué se adentró en el mundo del celuloide durante la década de los setenta de la mano trabajando en varias películas realizadas por su padre, José María Forqué, como Una pareja distinta (1974); Madrid, Costa Fleming (1975) o El hombre de la cruz verde (1976). Tras estos rodajes, y ya en los setenta, Verónica Forqué se consolida como actriz de comedia española y, después de dar vida al personaje de Cristal en ¿Qué he hecho yo para merecer esto?, de Pedro Almodóvar, Forqué salta a lo más alto en el sector cinematográfico español tras mostrar su vis más cómica,
Será ya en la década de los 80 cuando la actriz comienza a alzarse con varios Goya gracias a sus interpretaciones en El año de las luces y Moros y cristianos, de Luis García Berlanga (Premio Goya a Mejor Actriz de Reparto en 1987 y en 1988); y La vida alegre, de Fernando Colomo, que le dio su primer Goya a Mejor Actriz Protagonista (1988). Con Colomo también trabajaría en Bajarse al moro. El éxito llega a la vida de Forqué que, durante esta década, rueda también a las órdenes de Fernando Trueba, en la película Sé infiel y no mires con quién.
Los noventa fueron un período en el que Forqué llevó a cabo diversas colaboraciones con Manuel Gómez Pereira, con apariciones en Salsa rosa o ¿Por qué lo llaman amor cuando quieren decir sexo?, que le valieron éxito de crítica y público tal y como pasaría años más tarde, con Reinas, también de Gómez Pereira. 1993 fue el año de su cuarto y, hasta el momento, último Goya, gracias a su papel protagonista en Kika, de Pedro Almodóvar.
Entre sus últimos papeles, destacan sus interpretaciones en Sin vergüenza, de Joaquín Oristrell (2001); Clara y Elena, de Manuel Iborra (2001); La dama boba, también de Manuel Iborra (2005); o Ali, de Paco R. Baños (2011). Aunque en los últimos años Forqué se ha prodigado más sobre las tablas de los teatros españoles, actuando y dirigiendo, la actriz madrileña continúa haciendo gala de su versátil experiencia y, tras su última película en 2015, Tenemos que hablar, de David Serrano, está pendiente de estreno Remember me, rodada el pasado año. En estos momentos, Verónica Forqué se encuentra inmersa en el rodaje de Salir del ropero, de Ángeles Reiné.
Forqué sumará, así, su nombre a la nómina de cineastas y profesionales del sector cinematográfico galardonados con el Roel de Honor de la Semana de Cine de Medina del Campo, en la que figuran Juan Diego, José Sacristán, Emma Penella, Luis García Berlanga, Mercedes Samprieto, Elías Querejeta, José Luis Cuerda, Ángela Molina y Gonzalo Suárez, entre otros.