Reparto de puntos en Huerta del Rey en un partido que se ajustó al guion que Miguel Ángel Peñas preveía en la previa. Un partido de alternancias que se pudo decantar de cualquiera de los dos lados y que se decidió en la última jugada del encuentro.
Llegaba el Aula Alimentos de Valladolid cargado de bajas para este choque, a las ya sabidas de Cecilia Cossio y Elena Talavera se sumó la de Cristina Cifuentes, lo que creó un problema al técnico vallisoletano que vio cómo se quedaba con Eli Cesáreo solamente en el pivote.
No se notó sin embargo en la primera parte del partido, donde Ángela Nieto cumplió a la perfección en esa posición. Salieron las vallisoletanas con ganas de mandar en el marcador desde el inicio y entre Eli Cesáreo y María Prieto O’Mullony comenzaron con el festival anotador.
No se quedaban atrás las vallesanas, que buscaban una y otra vez a Lulu Guerra en las manos de Giulia Guarieiro y Lora Sarandeva, que lograron adelantar a las suyas por primera vez (4-5).
Fue entonces cuando el partido entró en una fase de alternativas en el marcador y reparto del dominio, en el que los dos equipos trataron de jugar como mejor saben. Fueron las visitantes las que parecían lograr un mayor ventaja gracias a un gol de Judith Vizuete (9-11) pero el Aula Alimentos Valladolid le dio un punto más de intensidad a su defensa y con ayuda de Lulu Guerra lograba correr el contraataque como le gusta para, gracias a un parcial de 6-1 darle la vuelta al luminoso y marcharse al descanso con una renta de dos goles: 16-14.
Tras la reanudación, Giulia Guarieiro, se convirtió en una verdadera pesadilla para las pupilas de Miguel Ángel Peñas, que no encontraron la manera de pararla. Hasta nueve goles logró en esta segunda mitad pese a los intentos de la defensa vallisoletana por pararla. El esfuerzo de la primera parte pasó factura a parte de la plantilla y sin Eli y Ángela en la pista se sufrió el ataque visitante.
Fue ese momento en el que el equipo de Robert Cuesta consiguió la máxima renta (22-27). Sin embargo, el Aula Alimentos de Valladolid no había dicho la última palabra en el partido. Con María Prieto O’Mullony batiéndose en duelo goleador con Guarieiro comenzó a recortar distancia. Volvieron a cerrar la defensa y Lulu Guerra apareció en los momentos clave.
Granollers intentaba sentenciar y el Aula aprovechaba cada resquicio para correr. Así, poco a poco se fueron reduciendo las distancias hasta llegar a la última jugada con empate a 32 y posesión para las locales. Miguel Ángel Peñas solicitó tiempo muerto para preparar una jugada ensayada que se saldó con un lanzamiento con el reloj parado que María Prieto O’Mullony no consiguió anotar en esta ocasión.
Empate a 32 en un partido vibrante en el que ambos equipos se vaciaron sobre la pista de Huerta de Huerta del Rey en el que la afición disfrutó hasta la jugada final.