Había que ganar y el CPLV lo ha hecho, clasificándose para una nueva final de la Liga Elite. Los vallisoletanos, que el sábado forzaron el tercer encuentro de su serie eliminatoria de semifinales ante Molina Sport, han vuelto a imponerse esta mañana al cuadro canario en Canterac por 7-1 y se medirán al Espanya por el título.
El tercer encuentro de semifinales ha estado marcado por el físico. Los canarios, con menos efectivos, ya notaron el sábado el cansancio en la recta final y este domingo lo han vuelto a pagar. Aunque a diferencia del primer y segundo choque, en éste todo ha ido a favor del CPLV. Y más cuando el mejor hombre de Molina, Eduard Requena, se ha auto expulsado en una carga ilegal con peligro de lesión sobre Dani Gutiérrez. Los colegiados no lo han dudado y han echado al catalán con 2+10 minutos.
En los dos primeros, con superioridad, ha llegado el 1-0. Lo ha rozado Mario Díez, que se ha topado con el palo. Y lo ha logrado Kyle Novak justo antes de que los canarios recuperasen a un efectivo. Habían pasado 8 minutos y el encuentro cogía color local. La pastilla era de los vallisoletanos. Y como muestra un botón, a los 15 minutos, Molina solo había lanzado en dos ocasiones por 16 del CPLV.
Faltaban los goles, más por el acierto del portero checo, Schejbal. El segundo lo logró Dani Díez, tras una gran acción de Mario Díez. Justo después de que Miguel de Saja se topase de nuevo con el palo. Quedaban 9 minutos para el descanso pero los locales querían más. Y el tercero y el cuarto han llegado justo a un minuto del intermedio. El primero en un disco que ha luchado Andrés Baños con Requena, y que el vallisoletano ha llevado a las mallas. El segundo del mismo Baños en la siguiente jugada, con gran asistencia de Olmo Ercilla.
Con 4-0, la final estaba mucho más cerca, pero en este tipo de encuentros no puede haber confianzas. Y no las ha habido. Sobre todo cuando a los cinco minutos de la reanudación, Requena ha hecho el 4-1 en una acción individual. Los vallisoletanos habían gozado de varias ocasiones pero el 71 de Molina ha materializado una de las primeras de su equipo. Aun así el triunfo nunca ha corrido peligro. Y por si alguien dudaba, ha llegado Olmo Ercilla para hacer un golazo a los 10 minutos, algo que ha acabado de finiquitar el duelo. Sólo uno después, Mario Díez se ha unido a la fiesta con el sexto de la mañana.
Así, la recta final ha sido tranquila para el equipo y la afición vallisoletana, que ha disfrutado los ocho minutos finales de todos los jóvenes en liza, demostrando que el futuro del club está garantizado. Carlos Cabrera ha rematado el triunfo con el 7-1.
El 25 de mayo será el primer encuentro de la final en Palma de Mallorca. Y el 1-2 de junio el segundo y, si hiciese falta, tercero.