El Instituto de Oftalmobiología Aplicada (IOBA) y el Instituto de Biología y Genética Molecular (IBGM) han logrado probar con un 90 por ciento de éxito una terapia innovadora a través de células madre procedentes de la médula ósea de un donante para un "grave grupo" de enfermedades que producen ceguera corneal agrupadas bajo el término de "deficiencia de células madre limbares".
Según ha explicado la coordinadora del "primer ensayo en ojo humano en el mundo" de esta nueva terapia celular para enfermedades de la superficie ocular, Margarita Calonge, "tras muchos años de trabajo" --la investigación dio sus primeros pasos hace 15 años-- IOBA e IBGM han conseguido comprobar la "eficacia" del tratamiento de esas enfermedades de la superficie ocular que conducen a la ceguera total a través de unas "prometedoras" células madre, denominadas 'mesenquimales', que proceden de la médula ósea de donantes vivos y que eran empleadas en la regeneración de otras partes del cuerpo como los huesos.
Además de corroborar la seguridad del tratamiento, Calonge ha explicado que este ensayo clínico de IOBA e IBGM ha permitido demostrar que esas células madre procedentes de la médula ósea tenían "ventajas indudables" respecto al tratamiento que se aplicaba hasta este hallazgo a partir de células madre procedentes del ojo del propio paciente, en el caso de que tuviera un órgano visual sano, o de un cadáver.
Entre esas ventajas ha citado que las células madre procedentes de la médula ósea no son rechazadas en el ojo de la persona intervenida a lo que ha sumado que tienen "excelentes" propiedades inmunomoduladoras y que el proceso de preparación del producto celular que se implanta en el ojo se reduce de cinco semanas a cinco días "con el enorme ahorro que esto supone".
El ensayo clínico, publicado recientemente en la revista científica Translational Research, ha sido trasladado también a la Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios (AEMPS) que, además de dar el visto bueno al citado estudio, ha iniciado ya el procedimiento de solicitud de autorización de uso que, según los cálculos de Calonge, podría ser una realidad en un plazo de 4 o 5 meses.
"Son muy rápidos", ha reconocido Calonge, que ha aprovechado la ocasión para alabar a la "modélica" actividad de la Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios. Cuando se haya obtenido el permiso, la nueva terapia celular pasará a formar parte de la cartera de servicios de la Universidad de Valladolid (UVA) y la Consejería de Sanidad también lo incorporará "cuanto antes" una vez reciba esa autorización, según ha confirmado el consejero del ramo, Antonio María Sáez Aguado, que ha arropado la presentación de esta terapia celular innovadora.
Según ha detallado Margarita Calonge, en este estudio clínico han participado 67 personas (8 están en periodo de espera) afectadas por un "fracaso corneal" y una ceguera "prácticamente total" por la falta de renovación constante de las células madre en el ojo, un síndrome que conduce a la ceguera total y cuya incidencia ronda los 500 casos nuevos al año en España.
"Veían o nada o muy poquito", ha explicado Calonge respecto a los pacientes que han participado en este ensayo clínico en el que se han incluido los casos más graves que no tenían otra solución. "Era o esto o nada", ha admitido la coordinadora de un informe que ha tratado a pacientes de otras comunidades autónomas e, incluso, de Portugal.
En concreto, esta enfermedad es más habitual en adultos de entre 35 y 55 años y entre sus causas destacan las quemaduras químicas asociadas normalmente a accidente laborales en el sector de la industria, enfermedades inflamatorias inmunes, enfermedades infecciosas graves, procesos fracasados de transplante de córnea y otras cirugías, aniridia congética o abuso mantenido de lentes de contacto.
En el caso del IBGM, centro mixto de la UVA y el CSIC, se encarga de producir a partir de esas células madre "una especie de sábana" de centímetro y medio por centímetro y medio que el IOBA aplica después sobre la superficie ocular del paciente con un "éxito bastante importante" del 86 por ciento, frente al 78 por ciento del que se consigue con las técnicas convencionales.
Según ha asegurado la coordinadora de la investigación, el alivio de los síntomas --"es una ceguera que duele"-- es "casi inmediato" aunque la visión se recupera poco a poco por lo que el IOBA prefiere no hablar de éxito o fracaso hasta pasados los seis meses desde la intervención.
Carrera profesional para el investigador
El director del IOBA, Miguel Maldonado, ha aprovechado la presentación de este estudio para reconocer la apuesta de la Junta de Castilla y León por mantener la actividad investigadora de este Instituto que dependía anteriormente del Carlos III de Madrid. "No todas las comunidades mantuvieron los centros en red", ha reconocido Maldonado para quien la presentación hoy de esta innovadora terapia celular es "el fruto" de la línea de investigación mantenida por el Gobierno regional.
"Sin ello los resultados de hoy no hubieran llegado a término", ha sentenciado el director del IOBA que ha advertido de que sin esta actividad muchos de los investigadores estarían ahora en Estados Unidos por lo que ha hecho un llamamiento al futuro Gobierno de la Comunidad a "apostar fuerte" por retener el talento a través de la plantación de la carrera profesional del investigador condicionada a la producción científica para que tengan un "futuro estable".
Por su parte, tanto el consejero de Sanidad como el rector de la UVA, Antonio Largo, han significado la importancia de dos institutos "emblemáticos" en la Universidad.